Si eres de los que, como nosotros, hace tiempo que buscan un heredero a la corona de «Skyrim», no busques más: «Dragon Age: Inquisition» es tu juego.
Ya lo dijimos en abril de este mismo año: «Skyrim» sigue molándonos, claro, pero hace tiempo que lo exprimimos al máximo y lo cierto es que queremos un heredero digno de la corona de «The Elder Scrolls«… A ser posible, un heredero que sea capaz de correr libre y a plena potencia en la nueva generación de videoconsolas, claro. Y lo cierto es que si mencionamos abril de este año es porque fue entonces cuando también dijimos (en esta noticia) que ese heredero iba a ser más que posiblemente «Dragon Age: Inquisition«. El tiempo pasa volando, señores, y resulta que este juego por fin saldrá a la venta el inminente 20 de noviembre para Xbox One, Xbox 360, PS4, PS3 y PC.
¿A qué viene nuestro hype?, se preguntarán algunos. Básicamente, tenemos que reconocer que «Dargon Age: Inquisition» nos pone palote desde que vimos su primer trailer por el motivo de que demuestra que un mundo de fantasía medieval como el de «Skyrim» también puede tener la riqueza gráfica multicolor y preciosista de, pongamos, cualquier lanzamiento de Square-Enix (vale, venga, de cualquier lanzamiento fuera de los híper coloristas). Porque está claro que cuando jugamos a este tipo de juegos queremos ser tipos rudos, oye, pero que a nadie le amarga un dulce y unos paisajes tremendos, además de efectos visuales dignos de una peli de Hollywood.
Y luego está, evidentemente, la propia trama de «Dargon Age: Inquisition«, que te pone en la piel de ni más ni menos que el gran Inquisidor: el líder de de las caóticas tierras de Thedas, asoladas por mil y una conspiraciones humanas y por una horda de dragones destructivos. Como Inquisidor, no sólo tendrás que correrte mil y una aventuras, sino que también tendrás que establecer alianzas con otros personajes legendarios para convertirse en el cabecilla definitivo y conducir a tu nación hacia un futuro mejor. ¿Qué tipo de líder vas a ser?