Rock. Folk. Así reza la página de inicio del MySpace de estos chicos que conforman Chief. Una inteligente manera de describir su sonido, a sabiendas de que, con semejantes etiquetas, público que les preste atención no será lo que les falte. Se trata de una formación de cuatro jóvenes que se conocieron mientras cursaban sus estudios en la Universidad de Nueva York y que, de vuelta a su California de origen, a principios de 2009, comenzaron a trabajar en un proyecto cuyo primer disco ha visto la luz hace unas semanas. “Modern Rituals” ha sido grabado en Los Ángeles con la producción del ganador de un premio Grammy Emery Dobyns, famoso por sus trabajos con gente como Patti Smith o Anthony & The Johnsons entre otros; por mucho que los primeros nombres que nos vienen a la cabeza al escuchar por vez primera el trabajo al completo de Chief son los de gente como Neil Young o Love, con esas agradables melodías que oscilan entre el folk y una pizca de rock en algunos momentos, acompañadas de las ya típicas letras sobre decepciones, desamores y demás.
Poco conocíamos de Chief hasta que apareció su trabajo de debut, además de varias canciones que habían colgado en su página de Spotify y que nos dejaban con ganas de más, como “Mightly Proud” o “Stealing”. Realmente emocionado me sentí al escuchar “Modern Rituals”, que viene acompañado además por una de las portadas más chulas que se podrán ver en una temporada (no me preguntéis por qué, pero algo tiene). Pero nada más lejos de la realidad: este disco dista bastante de la idea inicial que persigue. Y eso que la grabación comienza de manera prometedora, con el riff optimista de guitarra de “The Minute I Saw It” y con la pegadiza “Nothing’s Wrong” en la que destacan las interesantes voces de los hermanos Fujikawa, que recuerdan por momentos a la del vocalista de The Temper Trap. Pero, a partir del tercer corte, el álbum se desinfla clamorosamente, dando como resultado un trabajo que resulta anodino excepto en algunas ocasiones de lucidez contadas como en “Stealing” o la melancólica “Breaking Walls”, con esas bonitas guitarras que la introducen. Poco más es lo que podemos salvar de este “Modern Rituals”, si acaso las influencias folk que hacen interesante una canción como “Irish Song” y la coordinada sección rítmica de “Night And Day”, primer single acertadamente extraído para la promoción de su debut.
En conclusión, estos chicos todavía están bastante distantes de explotar el potencial que tienen. Cumplen perfectamente el estereotipo de banda indie americana de moda: un grupo de universitarios que se juntan para grabar algunas canciones y sonar con cierta credibilidad pero se les va claramente de las manos con un disco facilón, que de no ser por la excelente producción de Dobyns, sonaría todavía más insustancial y anodino de lo que ya lo hace. Chief juegan todavía en una división inferior a la de bandas como The Drums, Vampire Weekend y similares. Aunque, quién sabe, esa mezcla de folk rock con sus raíces californianas asociadas a esas oportunas armonías vocales pueden ser una garantía de éxito para el futuro porque, de momento, estos chicos tienen bastante que mejorar.