Hacía tiempo que una película no levantaba tanto revuelo. A día de hoy, yo sigo preguntándome cómo puede ser que casi todos mis conocidos hayan expresado de alguna forma u otra (aunque todos con bastante ahínco) unas ganas inaguantables de ver la nueva película de Christopher Nolan. Será por su buen hacer con la saga Batman… O por un boca-oreja infeccioso que ha diseminado buenas críticas con la velocidad de una pandemia… Sea por lo que sea, está claro que “Origen” es uno de esos estrenos que va a marcar el verano y, quién sabe, puede que incluso el año. Por ahora, lo tiene todo: grandes dosis de esa fantaficción que tan de moda ha puesto “Lost”, la alabada actuación de Leonardo DiCaprio y, sobre todo, una trama laberíntica que parte como más que estimulante (un tipo que puede infiltrarse en los sueños ajenos para “robar” secretos) y que, manejada con mano de hierro, bien podría convertire en la base de en un nuevo clásico.
Y si “Origen” pasa de puntillas sobre la palabra “freak”, que últimamente parece más una moda que otra cosa, lo nuevo de M. Night Shyamalan se reboza sin ningún tipo de rubor en el barro más friki que se pueda imaginar: su “Airbender El Último Guerrero” parte de una serie de animación de estilo manga y no se corta un pelo a la hora de escenificar batallas épicas entre tipos que lanzan bolas de energía. Es esta la antítesis del film de Nolan: las malas críticas han prendido más rápido que la pólvora… Y, sin embargo, ni esas malas críticas son capaces de aplacar las ganas de ver lo nuevo de este director. Al menos, no en mi caso. Que cada uno haga lo que quiera con su conciencia.
Pero basta ya de frikismos… Supongo que habrá quien pase de todo este rollito sci-fi y prefiera aferrarse al snobismo de siempre. Están de enhorabuena: esta semana llega a nuestras pantallas una película que lleva meses retrasándose y que ha conseguido, sin embargo, que se vayan acumulando elogios sobre sus espaldas. “The Girlfriend Experience”, de Steven Soderbergh, plantea algo que todos hemos pensado alguna vez: ¿cuándo se decidirán las prostitutas a hacer que un “completo” deje de significar lo que significa para ser “una experiencia completa de novia”? Todo esto con la crisis de fondo… Culturetas del mundo, unite and take over.
Por si a alguien le queda tiempo, el resto de estrenos sigue cumpliendo las cuotas genéricas para todo la familia: el pre-adolescente enganchado al gore se lo pasará teta con “Zombis Nazis”, los padres tendrán rollo histórico y emoción a partes iguales con “Los Dos Caballos de Genghis Khan”… y alguien disfrutará con “Repo Men”, la versión bastarda de la ya de por sí bastarda “Repo. The Genetic Opera” que gana en presupuesto pero pierde a Paris Hilton. No hay color.
[Raül De Tena]