Justo cuando desde San Sebastián nos llegan débiles ecos del no demasiado halagüeño panorama cinematográfico español, una de las películas allá presentadas parece demostrar que otras realidades son posibles. Y que puede que, al fin y al cabo, esa sea la senda a seguir de cara al futuro y no los trilladísimos caminos de otros directores supuestamente consagrados de los que últimamente también nos han llegado films variados. El caso de «Blancanieves» puede acabar comparándose con «Homes & Watson. Madrid Days» pero, donde parece que Garci incurre en la psicotronía más rancia a la hora de abordar un mito del imaginario público (Holmes), Pablo Berger acaba triunfando con buen gusto y elegancia. Muchos se verán atraídos por lo conocido de la historia de Blancanieves o por el morbo de ver a Maribel Verdú en el papel de la malvada madrastra trasladada esta vez al seno de la sociedad sevillana de los años 20. Pero lo que se encontrarán es una vibrante muestra de cine mudo que no se avergüenza en ningún momento de rozar lo weirdo (como en esos enanitos toreros). Hay quien ya habla de peli española de la temporada… Y de los últimos años.
Y si tras el subidón de cine patrio alguien necesita algo de más allá de nuestras fronteras, está claro que «Salvajes» de Oliver Stone proporcionará todo lo que el director proporciona últimamente… Y que cada uno decida si eso es bueno o malo. Por lo que, en mi caso, prefiero recomendar esa «Una Vida Mejor» que se erige como necesario y doliente retrato de los sueños rotos de una generación que ha visto cómo la pésima situación económica en la que le ha tocado «crecer» ha acabado por dar al traste con cualquier ilusión y optimismo.