El año pasado, la discográfica Aloud Music nos daba una de las máximas alegrías que una disquera puede ofrecernos: llevar su línea editorial hasta los escenarios. No todos los sellos pueden permitirse algo así: un alto porcentaje de estas discográficas no tienen la suficiente personalidad como para que podamos permitirnos hablar de una «identidad». Puede parecer triste, pero así es: muchos sellos acabaron haciendo primera el negocio por encima de la personalidad, y el principal resultado fue que más que una entidad de la que podemos fiarnos porque sabemos que tiene gustos afines a nosotros, las disqueras acabaron convirtiéndose en otras empresas de las que desconfiar. Por suerte, siempre existen excepciones… y Aloud Music es una de las más brillantes. Llevan años dándonos caña con su visión musculada e hipervitaminada de la música. Así que no es de extrañar que nos pusiéramos muy palote cuando el pasado celebraron su primer Aloud Music Festival, concentrando en varios días todo un conjunto de actuaciones circunscritas en su poderoso imaginario musical.
Lo jodido era plantearse que, al fin y al cabo, esto fuera más un golpe de suerte que algo que pudiera convertirse en un hábito, en algo que disfrutáramos cada año. Es decir: ¿veríamos una segunda edición del Aloud Music Festival? Señores y señoras, nos complace infinitamente afirmar que sí, que habrá una segunda edición que se celebrará entre los días 3 y 5 de abril en La [2] de Sala Apolo (Barcelona). Serán tres jornadas que las buenas gentes de Aloud se han permitido dividir en tres noches cada una con su propia identidad: la Astral Night (Rusia) del 3 de abril estará protagonizada por Maybeshewill (en la foto), Exxasens y Audiolepsia; la ArcTanGent Night del 4 de abril tendrá como maestros de ceremonias a That Fucking Tank, Vessels, The Physics House Band, Fura, Iepi y A Shelter In The Desert; y, por último, Dunk!Festival Night pondrá toda la carne en el asador el 5 de abril gracias a las propuestas de Jardin de la Croix, Unicornibot, Kokomo, Umberto, Minor Empires y El Páramo. Tres días para celebrar por todo lo alto que todavía existen discográficas en las que se puede confiar, sí señor.
