La simetría siempre se ha considerado un símbolo de belleza. No hay piropo más bonito que un «tienes una cara muy simétrica«. Pero la simetría, aunque bonita y equilibrada, también puede resultar aburrida. Especialmente en la moda, que siempre está a punto para introducir cosas loquers y cuanto más asimétricas mejor. Camper fue de las primeras grandes marcas en apostar por la asimetría y el desparejo, y lo hizo en 1988 inventando su modelo Twins, un par de zapatos en el cada pieza era distinta pero que, por supuesto, sólo podían venderse juntos. Consiguieron convertir la prenda de ropa más funcional y racional en algo totalmente sorprendente y, viniendo de una firma de calzado, esta iniciativa parecía un salto al vacío bastante importante. De esta forma, Camper estableció la edición de un par de zapatos Twins anual en el que el pie izquierdo sería diferente del derecho y le pedirían a un diseñador diferente que se hiciera cargo de crearla. Pasito a pasito, los Twins ya han cumplido nada más y nada menos que 25 años.
El encargado de celebrar este aniversario ha sido el diseñador alemán Bernhard Willhelm, que se ha marcado un interesante par de botas tipo cowboy para mujer y un par de Oxfords con cordones para hombre en los que ha jugado con un divertido estampado de rayas con el que parece que haya introducido los zapatos en dos botes de pintura diferente, uno en blanco y cemento y el otro en azul eléctrico y verde. No son unos zapatos para todos los gustos, y tampoco cualquiera puede tener el rollo y el valor para llevarlos. Pero la asimetría no es una cosa para todos los públicos… Ya se sabe: sólo está al alcance de lo más valientes.