Nos pusieron Internet en las manos, con su capacidad para poner a nuestro alcance toda la música que quisiéramos escuchar… Y lo compramos sin dudarlo ni un momento, sin mirar directamente la hoja de posología en la que claramente se señalaba un efecto secundario algo preocupante: la información iba a ser menos perdurable, el impacto de la música en nosotros iba a ser mucho menos intenso. Y, sobre todo, íbamos a perdernos muchas pero que muchas cosas, abrumados como estaríamos con la vastísima oferta a nuestro alcance. Muchos han sido esos grupos que, desde la prensa (o desde el corazoncito de aficionado melómano), lamentamos que no tuvieran la atención que merecían. Un ejemplo sería la banda Bananas, que estuvo activa desde 1999 hasta el año 2005 pero que nunca llegó a trascender su calidad de secreto a voces, de joya oculta de la corona del underground patrio.
Por suerte, parece que es el momento de reivindicar a Bananas. Y de reivindicarlos muy a saco. Para empezar, desde Gramaciones Grabofónicas acaba de publicar un recopilatorio que, bajo el nombre de «Hazlo Girar«, recoge la totalidad de las canciones grabadas por Bananas durante sus años de actividad. Y, por si eso fuera poco, para celebrar el lanzamiento y para reforzar esta reivindicación, el grupo ha decidido reunirse por tiempo limitado: por primera vez desde hace ocho años y por última vez en su historia, Bananas ofrecerá un total de cinco actuaciones literalmente irrepetibles. Apunta bien en tu agenda, porque como se te escape no te lo vas a perdonar nunca: Bananas actuarán el 16 de noviembre en Madrid (en la Sala Moby Dick junto a Germán Carrascosa y La Alegría del Barrio y otro artista por confirmar), el 13 de diciembre en Barcelona (en la sala BeGood junto a Corte Moderno), el 14 de diciembre en Tarragona (en la Sala El Cau acompañados por Los Urogallos), el 4 de enero en Santander (en Campamento Base junto a Fabuloso Combo Espectro) y el 8 de febrero en San Sebastián (en la Sala Gastestena). En inglés se dice que alguien está «bananas» cuando no toca de pies a tierra… Pero, en el caso de esta gira, estar «bananas» sería más bien perdérsela.