«Strange Rituals» de ATZUR nos tiene tan fascinados que le hemos pedido al dúo que nos hable de este discazo canción a canción.
Se suele decir que los polos opuestos se atraen… En realidad, aunque esta sea una teoría que nos hemos creído durante todas nuestras vidas, no es cierta. Sin puntos en común que hagan saltar la chispa, no hay conexión. De lo contrario, no existiría un dúo como ATZUR, compuesto por la barcelonesa Patricia Narbón y el austríaco-iraní Paul Majdzadeh-Ameli. Tras conocerse en Tinder, iniciaron un proyecto artístico compartido desde Viena en el que confluyen, de un lado, la esencia mediterránea; y, del otro, el carácter centroeuropeo y oriental. En medio de esa combinación cultural, la pareja encontró los hilos que los unían creativamente y que les permitían plasmar sus emociones en canciones.
A partir de ese momento, Patricia y Paul elaboraron una fórmula basada en piano, sintetizador y batería para alumbrar un pop elegante, sensitivo, policromático y dotado de una épica contenida. De esa idea perfectamente perfilada salió el EP de debut de ATZUR, “Flesh Blood Bones” (Seayou Records, 2019); y su evolución también en formato EP, “Big Delirium” (Seayou Records, 2022), que los situaban en el campo de juego de Chvrches o Florence + The Machine. De ahí que, en su día, llamaran tanto nuestra atención.
Sin embargo, Patricia y Paul supieron abrir su propia senda apelando al drama (bien entendido y mejor interpretado), a los sentimientos (a veces fulminantes) y a la sensibilidad (intensa y punzante) expresados con sinceridad y, en los momentos más arrebatadores, con el alma desnuda. Su estreno en largo, “Strange Rituals” (Seayou Records, 2023), condensa toda esa materia tan delicada que, en manos de ATZUR, se transforma en letras profundas y vestidas con brillantes ropajes sonoros.
“Esta es una colección de canciones que necesitaba y las he hecho. Apreté mi corazón y vertí todo lo que salió”, ha afirmado Patricia sobre “Strange Rituals”. Y no mentía. Porque, en este álbum, ATZUR han dado un paso más allá en su forma de sacar todo lo que llevan dentro. En este sentido, han afinado la receta que describíamos anteriormente para facturar piezas con mayor pegada melódica y ritmos más absorbentes.
Buen reflejo de ello es, por ejemplo, el corte titular, que marca el tono del disco y en el que Patricia canta parcialmente en español, al igual que en la ceremonial “Fuego”. Luego “Nostalgia” discurre por un synthpop flameante que también enseña su cara más luminosa en “People Pleasing” e infecciosa en “Manisfesting”, en la que ATZUR demuestran su habilidad para facturar estribillos pegadizos. Aunque la palma del disco se la lleva “Faithful Believer”, un temazo ultrarradiable y con trazas de rompepistas.
“Strange Rituals” funciona como una terapia sonora -por algo se alude a la salud mental en algunas de sus partes- en la que reflexionas, crees, imaginas, bailas, cierras los ojos, los vuelves a abrir y, cuando se acaba, entras en un estado de renovación completa. Para seguir de la mejor manera ese proceso, ATZUR nos explican canción a canción cómo fluye “Strange Rituals”.
1. INTRO / 2. STRANGE RITUALS. “La primera canción del álbum. Comienza la tormenta. En lugar de rayos estalla el piano, decidido y solemne, de manera brusca como un trueno grave y melódico que transporta al oyente al lado más explosivo de ATZUR. Esta canción sirve como manifiesto, una metafórica premonición de la marejada emocional que nos espera. Una canción sobre cómo enfrentarse a la sombra interior. Empiezan los rituales”.
3. NOSTALGIA. “Bailable pero reflexiva, nuestro primer ritual es la «Nostalgia». Una canción catártica que nos recuerda que no siempre dolerá y que es importante seguir adelante, ya que el poder para salir de un estado de ánimo desafortunado reside en unx mismx. Una canción ‘feelgood’ para desahogarse bailando y sacudirse la ansiedad. No estamos solxs ‘in this silly life’”.
4. FAITHFUL BELIEVER. “Habla del acto de admiración por algo o alguien que percibimos como elevado. Ser un total fan, aun cuando el objeto de nuestra admiración no es consciente de su grandeza. Cuando miras a esa persona a los ojos (o miras hacia adentro) y sabes que vas a ir a full, a muerte, sin importar lo que pase. Porque sabes que esa luz no va a apagarse jamás”.
5. PEOPLE PLEASING. “Sirve como un acto de liberación de las presiones de la sociedad. Ser unx ‘people pleaser’ es uno de los rituales más absurdos y estamos cansadxs, un pocx aburridxs, mentalmente agotadxs y solo queremos relajarnos y divertirnos. No nos importan lo externo, las expectativas de otrxs, los cambios repentinos de humor o el drama innecesario. Con este ritual decimos basta, porque ya sabemos que podríamos ser lxs favoritxs de todo el mundo, pero ya no lo queremos”.
6. AFFIRMATIONS (FOR BETTER MENTAL HEALTH). “El ritual constante. Es un mantra para repetir una y otra vez frente a la incertidumbre paralizante. Nos repetimos ‘se supone que no debes saber las respuestas a nada, vas a estar bien, quédate conmigo’ para alejarnos de esa necesidad constante de control tan tóxica. La vida fluye y queremos recordarnos que lo mejor es dejarse llevar”.
7. INTERLUDE II / 8. AURORA. “Los violines de «Interlude II» se abren a la luz que entra a raudales de «Aurora», celebrando todo lo hecho y vivido que nos ha traído hasta este momento presente. Este ritual es el de agradecimiento. Después de alejarnos de comportamientos tóxicos y de aprender a fluir sin atascos, ahora toca dar gracias por la vida vivida, por el amor de las personas que la han habitado o que aún habitan en ella. Por todo el camino recorrido y lo que queda por caminar”.
9. MANIFESTING. “El ritual de manifestar. Va directamente al corazón, como un ángel guardián que te saca de la oscuridad, un poder curativo. ‘No voy a dónde todo duele, me devuelvo a la luz’. El pensamiento seguido de acción. Trasladar lo inmaterial a lo material. Del mundo onírico al despierto. Esta canción es muy especial y llena de significado, suave y con un final explosivo. Como un ‘emotional awakening’”.
10. FUEGO. “Es la cara más orgánica de ATZUR, cuando a altas horas de la noche te encuentras desnudo de todo adorno. Sólo voces y percusión. Con un interludio de lucidez, un piano melódico acompañando la voz. ‘A veces todo duele, pero siempre duelo yo’”.
11. MENTAL HEALTH WALK. “Dar paseos ayuda a digerir los pensamientos y a poner las cosas en perspectiva. No hay que avergonzarse de detenerse y tomar un descanso de la realidad. El último ritual, de aceptación, de tomar distancia para sumergirnos con claridad. ‘Intento construir algo que la gente no intente romper’. ‘No tenemos que hablar, vamos a dar un paseo’”.
12. OUTRO. “Terminando con «Outro«. Respiramos profundamente unas cuantas veces y nos conectamos a una meditación guiada que hace coincidir nuestra respiración con el ritmo del mar”. [Más información en la web de ATZUR || Escucha «Strange Rituals» en Apple Music y en Spotify]