La charla con Ángel es distendida y tan divertida como se podría esperar. No es un nerd: es un friki de Nivel 10, en el mejor sentido de la palabra. Y eso que repitió un par de veces en el programa de que es una Wikipedia Humana es verdad. «Tengo información de cosas que la gente alucina. Tengo mucha capacidad de retentiva. Por ejemplo: ¿sabes cual es el animal que no se tira pedos? ¡El canguro! Es el único animal que tiene un sistema digestivo lo bastante evolucionado como para no producir gas». ¿De donde sacas todo eso?, le pregunto ¿De algún documental del Explora? «A saber», me responde, y sigue a continuación:»Otra más: los primeros organismos de la Tierra no aspiraban oxígeno, aspiraban nitrógeno, porque se crearon en la parte interior de los volcanes… Y otra: ¿sabías que muchos dinosaurios tenían dos cerebros? ¿Y algunos de ellos en el culo?».
Lo dicho: Nivel 10. Lo que me lleva a preguntarle si, con semejante nivel de frikismo, llegó a verse con posibilidades con Laura. «Como dice la mecánica cuántica, todo es posible. Aunque sea en un cero coma cerocerocerocero-uno, es posible que esta silla se convierta en un reactor nuclear. La posibilidad existe. Pero Laura quizá lo vio mejor que yo… La verdad es que no encajábamos demasiado. Además, la brecha generacional es bastante importante: le saco 14 años. Es decir, yo viví Barcelona 92, y lo viví todo: «la nominación a la ville de Barcelone» (y esto me lo dice imitando la voz de Juan Antonio Samaranch), la construcción de la Vila Olímpica… Entonces yo tenía 14 años, y ella nació ese año«.
Yo le digo que sí, que vale, que la brecha generacional. Pero que donde realmente había chicha era con Ana la Amiga, la Cuarta Haim (que es como la llamamos en la redacción de FPM). Y cuando le pregunto por ella, se mea de la risa y me da a entender que todo Cristo le ha hecho los mismos comentarios. Claro, chico, ¡es que es evidente!, le digo. Y me saca lo del «montaje creativo» otra vez y le digo que nanai, que la tensión que había entre ellos en la tienda de ropa interior (en el segundo programa) no era ni montaje ni hostias y no se veía, en cambio, las pocas veces que estuvo con Laura.
«A ver, es verdad que con Ana pasamos mas tiempo que con Laura, y sólo por eso ya es diferente la relación que se establece. Y sí es verdad que la note más echada p’alante. Pero sigue habiendo un abismo generacional (Ana tiene la misma edad que Laura). Y es verdad que yo con un chica con la que no hay tensión sexual estoy más relajado, soy más abierto, más simpático… Mucho más de todo. No es que no me gustara Ana, hay que ser un poco tonto para que no te guste Ana; pero, claro, ¿cómo se llama el programa? Pues a eso es a lo que íbamos. Además, ¿y yo que sé si Ana tiene novio?». ¿¿No se lo preguntaste?? «¡No me parecía algo adecuado de preguntar a una tía que acabo de conocer en la tele!» ¿Y no has hablado más con ella? «Quiero que acabe el programa y luego ya veremos…»
Con estos puntos suspensivos deja zanjado el tema, momento que aprovecho para comentarle que en la redacción tenemos la teoría de que ahí va a haber tema, y que si no lo hay va a ser por su parte, así que esperamos que se espabile. La verdad es que nos gusta más Ana que Laura, es más rock’n’roll y parece que se vaya a arrancar a cantar «The Wire» en cualquier momento. Pero él, que ya he dicho que es un Señor, capea el comentario. Total, una pena, porque no tuvimos ni «Bella y Bestia» ni «Ángel y la amiga Haim«.
¿Se esperaba irse tan pronto del programa? «Hombre, esperaba estar mas tiempo, la verdad. A ver, no soy el número 1, que la cosa ya se ve donde va a quedar, pero alguna oportunidad creía que tenía». Ya, lo de la mecánica cuántica y eso. Y entonces le pregunto cuál sería para él la final perfecta (no la que será, porque Ángel no puede hablar de cosas que no se hayan visto todavía en el programa): «Para mí, la final perfecta para Laura serían todos, pero bueno. Si tengo que escoger, serían Gonzalo (el Matemático: majo, muy listo…), Marc el Bombero y La Pepa«, y me cuenta que con La Pepa, precisamente, acabaron el fin de semana anterior en el Plataforma de fiesta hasta las cinco de la mañana.
Y, oye, le pregunto, el tema chatis ¿qué? «Pues fatal. Que ligar en Internet es muy fácil y el efecto fan es un arma de doble filo y hay que andar con cuidado. Por un lado, mola ver que a la gente le mola tu rollo. Alguien en Facebook comentaba hace unos días que tenía muy buen gusto en cómics… (Se refiere a Óscar Broc, que aplaudió en su Facebook que el primer cómic que abriera al llegar a casa fuera «The Authority«.) U es guay. Pero luego hay otras cosas. Por ejemplo, un chaval me envió un mensaje en el que me decía «pena de heterosexual». Y ya está. ¿Y qué contestas a eso?». Yo le comento que se ha convertido en un icono sexual osuno y se lo toma a risa (un poco como todo). «No puedes ser tajante con la gente, porque la gente cuando te escribe espera que, como mínimo, les respondas. Y eso que hay gente que se pasa: después de salir del programa, ha habido personas del mundo de la lucha que me han puesto de vuelta y media y me han llamado de todo. Pero, vamos, me da igual«. Naut practica la lucha libre desde hace tres años y, si su paso por el programa ha conseguido despertaros curiosidad por el tema, sabed que cada dos semanas hacen combates en un pequeño local del barrio de Sant Antoni que se llama Spank the Baby.
Por lo demás, lo último que le pregunto es si realmente se ve con una chica que no sea friki o que no comparta sus aficiones, como era el caso de Laura: «Es que no ser friki es complicado. Todos somos frikis de alguna manera. Me hace mucha gracia la gente que dice que no le gustan los cómics, eso no es verdad: no has encontrado un cómic que te guste. Eso sí me lo creo«. Y a esa gente que quiere investigar su lado friki y que quiere empezar a leer cómics pero no sabe por donde empezar, ¿cuál le recomendaría? «»La broma asesina«, de Alan Moore. Se lee en un momento, y es el primer cómic en el que se explica de dónde viene el Joker, que es un personaje que yo creo que a todo el mundo en mayor o menor medida le atrae. Es un poco bestia, pero te ayuda a entender de dónde le viene la chaladura al hombre«.
El Joker, ese supervillano que dice que, si hay que despedirse, mejor hacerlo con una sonrisa y al que Ángel Naut le gusta citar aunque él, de supervillano, no tenga nada de nada. Un héroe más bien, hoygan. Genio y figura.