¿Qué pasa si juntas «Theme Park» con «Carmageddon» y la libertad para hacer el cabra de la saga «GTA»? Pues pasa que te sale un juego como «ScreamrRide».
Reconozcámoslo: por mucho que los desarrolladores de videojuegos se partan la cabeza intentando idear mecánicas de juego sofisticadas y complejísimas, no existe placer equiparable a hacer el cabra en un mundo virtual. Gran parte del éxito de la saga «GTA» está en eso: en poner a tus pies todo un mundo argumental que explorar pero, a la vez, concederte el suficiente libre albedría como para practicar la destrucción y ponerte a atropellar a transeúntes como pasatiempo. Ahí está, además, la clave del éxito de toda una pequeña-gran genealogía de juegos cuya diversión nace de una especie de caos controlado.
A esta estirpe viene a unirse «ScreamRide«, que acaba de ponerse a la venta para Xbox One y Xbox 360 (se puede adquirir a través de Xbox LIVE por el precio de 39,99€ para One y 29,99€ para 360). La idea podría resumirse en una pregunta que seguro que te produce escalofríos de placer anticipado: ¿qué pasaría si juntaras las posibilidades creativas de «Theme Park» o «Project Spark» con el rollo hacer el cabra de «Carmageddon» y lo bañaras con unas gotitas sandbox de ultimísima generación de la saga «Grand Theft Auto«? Pues lo que pasaría es que obtendrías «ScreamRide«.
La mecánica de este juego es simple a más no poder. Para empezar, el 50% de la diversión de «ScreamRide» nace en su poderosísimo motor de creación, con el que tendrás que idear las atracciones de feria más bestias que se te ocurran: montañas rusas mortales, carreras enloquecidas, lanzamiento de bolas con personajes dentro contra edificios para destruirlos… El otro 50% de la diversión reside, entonces, en jugar y en desparramar ya sea en las atracciones que has creado tú mismo o las que tus colegas y el resto de usuarios han colgado online para que disfrutes de ellas. Al fin y al cabo, ya se sabe: hacer el gorila es mucho más divertido cuando lo haces en manada.
