Si eres de los que se ponen delante de la consola no para que le compliquen la vida, sino para liarse a mamporros, te interesan «Toukiden Kiwami» y su vídeo de presentación.
A ver, a la hora de ponerse delante de la videoconsola existen dos posibilidades básicas: la complicación (necesaria o no) o la simplicidad absoluta. Con esto queremos decir que un juego puede optar por la diversión narrativa profunda, con tramas amplias, dinámicas de juego complejas y otras mandangas muy guays pero para las que, sinceramente, no siempre tenemos el cuerpo preparado. Por el contrario, hay otros juegos que sirven de vía de escape total: son un machaca-botones absoluto en el que dejarte los estreses del día a día a base de cargarte a todo lo que se menea sin necesidad de pensar demasiado.
En esa sanísima estirpe de videojuegos habita precisamente la saga «Toukiden«, que con su primera entrega ya presentó un mundo apasionante donde el machacar a diablos está a la orden del día. La excusa es sencilla: durante siglos, los Oni (es decir: demonios chunguers que no quieres ver ni en pintura) han vivido en las sombras, agazapados esperando el momento de saltar a la luz y cargarse a la humanidad sin dejar ni una personita viva. Pero, de repente, un suceso conocido como The Awakening altera el estado natural de la realidad, dejando algunas brechas espacio-temporales que los Oni aprovechan para decir «Hey! ¡Es la nuestra! ¡Vamos que nos vamos!».
Esto ya lo vivimos en la primera parte de la saga, pero es que ahora «Toukiden Kiwami» está a punto de caer entre nosotros para ofrecernos todo lo que ha de ofrecer una buena secuela: más mamporros, más demonios, más luchas, más adrenalina… Pues eso, «más» en general. «Toukiden Kiwami» desembarcará en PS4 y PS Vita el próximo 27 de marzo, que será el momento ideal para sudar de que la primavera está llegando y encerrarse en casa a cal y canto para jugar como si no hubiera un mañana. Hasta entonces, sin embargo, os dejamos con un video de animación que resume más que bien en cinco minutos el espíritu (beligerante) de «Toukiden Kawami«. Así vas preparando el cuerpo (y los dedos).