Uno de los juegos más interesantes de los últimos tiempos fue aquel «Alice» del año 2000 que recurría al grafismo y al trabajo previo de American McGee a la hora de abordar los recovecos más oscuros de la historia de «Alicia en el País de las Maravillas«. El resultado fue un juego que todavía se recuerda como una experiencia inmersiva y deliciosamente malrollista. Es por eso, porque somos sadomasoquistas y nos flipa pasarlo mal, que las primeras noticias oficiales tras muchos rumores al respecto de la secuela de aquel juego nos han llovido como agua de mayo (y eso que estamos en marzo). «Alice: Madness Returns» se lanzará el 14 de marzo de la mano de EA y, a diferencia de su predecesor, no llegará en exclusiva para PC, sino que Xbox 360 y PS3 también recibirán sus respectivas copias. El argumento parece profundizar en el trauma de una Alicia adulta que, tratada por un psiconalista, se empeña en demostrar que sus pesadillas no son fabulaciones de su mente, sino memorias traumáticas. Esto, sin embargo, es sólo una excusa para el festín de plataformas y combates… Pura truculencia vestida de cuento infantil.
