Imposible saber si los auriculares diseñados por Proenza Schouler para Master & Dynamic son más moda o tecnología… Lo que es fácil saber es que los quieres. Ya.
Muchos dicen por ahí que la colaboración mas deseada entre tecnología y moda es la que tiene que ver con los relojes y brazaletes «wearable«, desde el iWatch seduciendo a popes de lo fashion hasta las ententes cordiales entre Intel y Opening Ceremony o entre Samsung y Diesel Black Gold. Pero la verdad es que, teniendo en cuenta que todavía estamos muy pero que muy al inicio de esa colaboración, no está de más quedarse con otra que verdaderamente está dando unos frutos realmente sorprendentes en los últimos años: la tendencia de diferentes diseñadores de moda a dar su visión de los auriculares de más alta calidad.
Han habido casos como los Beats by Dre reinventados por Fendi u Oscar de la Renta, la firma Frends reclutando a Rebecca Minkoff y Sass & Bide o esa locura de 5.000$ que surgió del choque entre Monster y Chanel. Los últimos en apuntarse a esta tendencia son Proenza Schouler, quienes han realizado una limitadísima tirada de auriculares para la marca Master & Dinamic de Nueva York. Y lo de «limitadísima» no es un argumento en broma: solamente se han fabricado un total de 600 unidades, 200 en cada uno de los colores disponibles (blanco, negro y azul).
Lo más interesante es, sin lugar a dudas, el aspecto retro de los acabados metálicos, que casan a la perfección con el trabajo del cuero tan típico de la firma Proenza Schouler: la piel de chivo de la diadema (con toques en dorado, azul o negro) contrasta con la piel de cordero perforada de los propios auriculares. Una preciosidad de aspecto vintage pero de tecnología futurista que incluye desde cancelación del ruido exterior hasta una calidad de sonido de calidad impoluta.
De hecho, no sorprende para nada que Jack McCollough y Lazaro Hernandez se hayan atrevido finalmente a diseñar unos auriculares, ya que nunca han ocultado que la música es su otra gran pasión más allá de la moda: «A un nivel personal, la música es una parte muy grande de nuestras vidas y de nuestro proceso creativo. Podemos regular nuestro estado de ánimo dependiendo de la lista de reproducción que esté sonando. Nada más en nuestras vidas tiene ese poder. Es infinitamente inspirador«. ¿Significa esto que los aficionados a la música nos veremos agraciados con otros regalos de Proenza Schouler como esta colaboración con Master & Dinamic? ¿A quién hay que ponerle velitas?