SónarKids vuelve a celebrar su edición de invierno con unos invitados excepcionales: las máscaras de Shoboshobo que los niños vestirán en el espectáculo Kumisho.
¿Quién dijo que la electrónica es un mundo adulto? Nadie, nunca. Y si alguien lo dijo, es que nunca había participado en el SónarKids. Desde 2009, el que es uno de los más interesantes festivales de electrónica del mundo y gran referente en Europa, el Sónar, decidió ampliar su familia y crear un festival de música y experiencias creativas para niños y padres. Pensado para que todos aprendan juntos disfrutando de la música y la tecnología de una manera original e innovadora, nos demuestra una vez más que el arte es definitivamente ageneracional. Desde entonces, el SónarKids ha ido modificando su formato para adaptarse a diferentes propuestas artísticas y espacios -desde un museo hasta una playa-, siempre con el referente de la música y la tecnología como pilares básicos.
Estas Navidades, concretamente los días 27 y 28 de diciembre de 2014 y 2, 3 y 4 de enero de 2015, padres y hijos podrán disfrutar de su tiempo libre juntos con una original y divertida propuesta organizada por el festival en el CosmoCaixa. El museo acogerá el show electropop del trío franco-japonés Kumisho, además de un taller de diseño de máscaras dirigido por el artista francés Shoboshobo, donde los asistentes podrán adentrarse en el mundo de la ilustración diseñando sus propias creaciones y usándolas durante el mencionado show.
Kumisho es un espectáculo tecnológico que combina música, ilustración y animación: los tres formatos intercalan momentos lentos y tiernos con partes más dinámicas y energéticas. Durante la primera sección del espectáculo, las proyecciones no sólo tienen lugar sobre la pantalla principal, sino también sobre el vestido que lleva Kumisolo, la cantante. Durante el espectáculo, los niños podrán llevar las mascaras que habrán creado en el taller organizado por Mehdi Hercberg, artista tras Shoboshobo cuyo trabajo consistente en una amplia gama de proyectos gráficos centrados principalmente en monstruos y criaturas extrañas de carácter pop ha sido expuesto por todo el mundo.
El show mezcla a la perfección los sonidos de teclado electrónico y la tiernas melodías de Kumisolo -cuya voz suave y efímera interpreta canciones en francés, japonés y inglés bajo el toque roquero del guitarrista Romain Romanovski – con el universo de monstruos garabateados y de paisajes geométricos creado por el artista visual Shoboshobo: el resultado es un actuación colorida, vivaz y ensoñadora que cautivará a todos los asistentes, sin importar las décadas que los separen.