Para la próxima temporada de primavera / verano, Les Petits Vagabonds proponen una colección de ropa que convertirá a los niños en campeones soñadores.
[dropcap]P[/dropcap]ara dedicarse al diseño de moda siempre hace una visión, una mirada única y excepcional que convierta cada una de tus piezas en una historia por sí misma. Y esta necesidad se convierte en algo todavía más fundamental cuando nos referimos al diseño de moda para niños: aquí no sólo hace falta una visión original, sino una mirada que sea capaz de estimular la (infinita) imaginación de los más pequeños y de hacer soñar a los adultos. En los últimos meses, en nuestra sección Fantastic Peques hemos visto propuestas tan interesantes como las de Mini Rodini (que lleva hasta el extremo el gusto por el print estrafalario) o Mono (que trata al niño como un superhéroe)…
A ellas viene a sumarse ahora la próxima colección de primavera / veranos 2015 de Les Petits Vagabonds, que bajo el título de «You May Say I’m A Dreamer» viene a estimular ese carácter tan soñador que convierte a los niños en verdaderos campeones de las fabulaciones fantasiosas. La nueva colección de Duygu Hamdioglu Massol parte de una frase de Yoko Ono: «We are all dreamers creating the next world, the next beautiful world for ourselves and for our children» («Todos somos soñadores que están creando el próximo mundo, el próximo y precioso mundo para nosotros y para nuestros niños«). Unas palabras verdaderamente visionarias en lo que respecta al trabajo de esta diseñadora que siempre ha apostado por ver a los niños ni como hipsters ni como super-héroes, sino simple y llanamente como vagabundos sin necesidad de mostrar fidelidad a tierra estética alguna.
En el caso de «You May Say I’m A Dreamer«, Les Petits Vagabonds juega a explicar múltiples historias que van en diferentes direcciones: los prints pueden alimentar un argumento que nada tenga que ver con los detalles. La inspiración surge de los colores rave de los 90, además del rojo granada y el azul menta. Vamos, una maravilla de colección ideal para el llenar el verano de colores y motivos frescos que alimenten la imaginación de los pequeños vagabundos que tenemos cerca a la vez que nos obligan a nosotros a recuperar un deporte que muchos abandonaron cuando eran pequeños: soñar despiertos.