Hosoi es una palabra japonesa que significa «escuchimizado»… Curiosamente, Hosoi también es una firma cuya primera colección es una celebración de la «Carne».
[dropcap]H[/dropcap]ace unos días, cuando le preguntábamos a Victor Von Schwarz cuál era su apuesta más firme para esta temporada que acabamos de descorchar (en este artículo), nos respondía sin dudarlo ni un segundo con un nombre contundente pero enigmático: Hosoi. Las preguntas a partir de esta mención surgen a borbotones desde el fondo de la mente periodística: ¿qué es Hosoi? ¿Quién? ¿Dónde? ¿Cuándo? ¿Por qué? Así que empecemos por el principio: «hosoi» es una palabra japonesa que significa delicado, delgado con poca carne («escuchimizado», que diría mi madre)… Pero ahí está la primera y dulcísima contradicción de esta firma: su primera colección se titula «Carne» y es una gozosa celebración del término. Así que de «escuchimizado», bien poco.
Sigamos con las preguntas básicas: ¿quién? Israel y Andrés, y tampoco necesitas saber mucho más de sus personas porque lo que aquí cuenta básicamente es que sea su trabajo el que hable por ellos. Y vamos si habla. ¡No se calla! ¿Dónde? En Madrid, pero su visión de la moda es exportable no sólo al resto de la Península, sino incluso fuera de nuestras fronteras. Hasta el infinito y más allá. ¿Cuándo? Todo el rato. Un no parar. Y es que, viendo las imágenes de su primera colección, es imposible no dejarse llevar por la sensación de que el aquí y el ahora les pertenece profundamente a Hosoi y su «Carne«. Lo que nos lleva a la pregunta definitiva: ¿por qué?
La respuesta es compleja a la hora de ser expresada en palabras. Ya se sabe lo que dicen: que una imagen vale más que mil palabras… Y, en este caso, las imágenes de la colección «Carne» son las que responden de forma mucho más que elocuente a la mencionada pregunta. ¿Por qué? Porque Hosoi tienen un concepto totalmente subyugante del unisex, una palabra rancia y viejuna que los diseñadores no mencionan nunca porque prefieren hablar de romper códigos de género a la hora de vestir. De hecho, ni cortos ni perezosos, han decidido encabezar la nota de prensa de su primera colección con unas palabras más que interesantes: «La ropa de chico no existe, la ropa de chica no existe, el color carne no existe«.
Esta filosofía fardonamente nihilista se traduce en prendas de cortes geométricos pensadas para que tanto ellos como ellas puedan vestirlas en un gozoso oversize. Dentaduras, cuchillos, patas de pollo, figas… Hosoi le da cañita de la buena a los estampados ya sea en forma de patrones repetitivos que aniquilan las formas de camisas, camisetas, leggings y pantalones o como un motivo único que luzca esplendoroso en una sudadera. Tampoco habrá que perder de vista su loquísima reinterpretación de la chaqueta perfecto en color rosa o ese gorro de pelos en el mismo color. De hecho, el rosa carne es el tono que predomina junto a los siempre omnipresentes blanco y negro. Cuando en las santas escrituras hablaban de «la resurrección de la carne» seguro que se referían al advenimiento de Hosoi.
[Photography: Javier Tomás Biosca // Model: Álvaro Poch / María Forqué / Denys Pivtorak // Helpers: Javiera García – Huidobro + Beatriz de Blas // Hair: Miguel Rodríguez para Corta Cabeza // Make Up: Andrea para Corta Cabeza // Sneakers: Reebok]