Con «Break The Rules», Charli XCX ya lo había dejado claro: su mercado es el yanki… Pero ahora se le ve demasiado el plumero con su nuevo single «London Queen».
¿Sabes esa insidiosa sensación que te sobreviene cuando te das cuenta de que te has equivocado lo más grande? De que, por poner un ejemplo (nada casual), reivindicabas un artista recién llegado porque creías que significaba y significaría algo… Pero que, con el tiempo, se revela que siempre significó algo totalmente distinto (y, sobre todo, algo que no hubieras reivindicado desde un buen principio si llegas a saber en qué derivaría la cosa? Pues eso es precisamente lo que sentimos por aquí con Charli XCX: pensábamos que sería una alternativa oscurilla a la diva post-adolescente típica y tópica. Pero no.
Sólo hay que ver los dos singles con los que está adelantando el que será su segundo disco, que se titulará «Sucker» y que se lanzará oficialmente el 26 de enero de 2015. El primero ya lo destripamos (de forma nada sana) en este Fantastic TV: «Break The Rules» nos parecía y nos parece una mamarrachada de tomo y lomo. Lo que no sabíamos es que la superaría con creces en «London Queen«, donde incluso llegá a cantar gilipolleces como «I never thought I’d be living in the USA, doing things the American way / Never thought I’d be living in the USA, living the dream like a London queen«. ¿En serio, Charli?
Y es que lo que podría haber sido una versión gozosamente goth (¿gothosamente?) del mito de la lolita con un micro se ha convertido en una más del montón, en una Ke$ha de pacotilla o algo peor. Dice Charli XCX que en «Sucker» se ha puesto mucho más punk que en su debut… Nosotros, además de desear tener diez minutos a su lado para explicarle qué es realmente el punk, no podemos hacer más que sopesar este «London Queen» como lo que es: el intento definitivo de una diva en ciernes para agradar de forma comercial en EEUU. En «Break The Rules» apelaba al rollo high school yanki, y aquí no podría dejarlo más claro.