Impedimenta publica «Historia y Desventuras del Desconocido Soldado Schlump» de Hans Herbert Grimm, obra pacifista clave del período de entreguerras.
A veces pasa. Llegan a nuestras manos libros cuya historia es igual o más fascinante que lo que cuentan sus propias hojas. Es el caso de «Historia y Desventuras del Desconocido Soldado Schlump» de Hans Herbert Grimm, que ahora se publica en nuestro idioma gracias a Impedimenta. La historia es tal que así: la primera vez que se publicó esta novela fue en 1928, por obra de la editorial alemana Kurt Wolff. Eran tiempos de cambio e inestabilidad, en época de entreguerras pura y dura. En ella, Grimm volcaba de forma anónima sus vivencias personales en la Primera Guerra Mundial y hacía una sentida proclama antibelicista al mismo tiempo que criticaba el nacionalismo, alzando su voz en contra de los sentimientos que empezaban a azotar por la época a Europa. Obviamente, el libro se convirtió en una molestia cuando los nazis llegaron al poder, que lo tildaron de «antigermánico» y que lo añadieron a su larguísima lista de libros a quemar. Y así fue: todas las copias del soldado Schlump fueron quemadas en plazas públicas. Todas menos una. Grimm conservó una copia del libro y lo guardó en una pared, a la espera de que llegaran tiempos mejores para poder recuperarlo.
La «Historia y Desventuras del Desconocido Soldado Schlump» estuvo nada menos que ochenta años escondida, tiempo en el que su autor intentó recuperar su trabajo como decente (en vano), fue enviado a Weimar para pocos días más tarde suicidarse. Un final dramático para un libro cuya valía no se limita sólo a su peso literario y que no encontró el lugar que le correspondía en la literatura universal hasta que el estudioso de libros quemados por los nazis, Volker Weidermann, recuperó esa única copia existente y lo volvió a poner en circulación. Gracias a ello, hoy en día la obra de Grimm está considerada uno de los cantos pacifistas más sentidos e inteligentes. Pero si apasionante es la historia que rodea el libro, más apasionante aún es la que se cuenta en él: a través de sus páginas seguimos a ese soldado que sobrevive como puede en medio de la guerra y cuya trayectoria es explicada sin heroicismo de ningún tipo y sin hipérboles, sino tal y como lo vivió su escritor.