¿Tú también tienes la sensación de que el gran ojo de Internet te espía? Entonces te interesa el Blackphone: el primer smartphone centrado en la privacidad del usuario.
A todos nos ocurre lo mismo: con el advenimiento de las redes sociales, con la omnipresencia de gigantes como Google o Facebook, con la interconectividad absoluta entre sistemas y tecnologías, ¿no os da la impresión que, cada día, váis dejando detrás vuestro una especie de camino de miguitas a lo largo y ancho del mundo virtual? Las miguitas son, evidentemente, todo un conjunto de micro-informaciones más o menos valiosas sobre nosotros mismos, informaciones que por separado pueden no significar mucho pero que, si las juntas, arrojan una visión bastante escalofriante de nuestras propias personas y personalidades. Sí, esta sensación es cada vez más generalizada… Así que no es de extrañar que la primera remesa de Blackphones se agotara en pre-order justos después de su presentación en el World Mobile Congress. Pero empecemos por el principio y expliquemos en qué consiste este proyecto visionario.
El Blackphone es el primer smartphone que tiene como principal preocupación preservar al máximo tu privacidad. Para ello, pone el acento sobre ciertos puntos claves como las comunicaciones privadas (las llamadas de voz y video y la mensajería de texto es absolutamente privada graicas a las apps Silent Phone y Silent Text, creadas por Silent Circle), la seguridad wifi (el administrador Kismet Smarter wifi impide que los puntos de acceso wifi accedar a información del usuario, tal y como historial y demás), el centro de seguridad (que te permite variar los parámetros de privacidad de absolutamente todas las aplicaciones de forma inmediata), el borrado y protección remotos (podrás borrar cualquier información desde cualquier punto del mundo en cualquier momento), la navegación web anónima y VPN (Disconnect Search proporciona una protección totalizante de navegación privada protegiéndote de rastreadores web invasivos al ocultar la dirección IP del usuario, las cookies del navegador y la información personal) y el almacenamiento cloud totalmente privado (gracias a una fortísima encriptación).
¿Las malas noticias? Pues eso: que el primer lote de Blackphones se agotó por completo y, aunque ya están llegando las primeras unidades a sus felices compradores, el resto del mundo tendremos que esperar hasta el próximo 14 de julio a que se pongan nuevas unidades a la venta en la tienda online de Blackphone. Señores y señoras, el futuro ya ha llegado. Y, por suerte para todos, va a ser un futuro lleno de privacidad… Nada del Gran Hermano.