«Titanfall: Expedition» expande el universo de uno de los juegos más icónicos de la nueva generación de consolas… Vamos: despiporre to the max.
Hace unos días, a tenor de una expansión recientemente lanzada para el juego «Ryse: Son of Rome» (de la que te hablamos en esta noticia), afirmábamos que los lanzamientos para la nueva generación de videoconsolas ha sufrido el habitual receso post-estreno generacional. Vamos, que después de dejarnos ciegos con los brillos de la primera hornada de lanzamientos, lo normal es que las cosas sufran un preocupante (y algo aburrido) parón hasta que llegue una segunda hornada o hasta que la cosa se normalice y los lanzamientos se hagan más regulares. Sea como sea, también decíamos entonces que deberíamos darle gracias al Dios de las Consolas porque, a día de hoy, contamos con las ya consagradas expansiones que alargan la vida de los juegos hasta el infinito y más allá. Y, en casos como el de «Titanfall«, ¿cómo no íbamos a querer que se alargaran las horas (y los días y los meses) que pasemos delante de la pantalla?
Por suerte para todos, desde el pasado 15 de mayo ya se puede adquirir «Titanfall: Expedition» para PS4 (la versión para Xbox One se pondrá a la venta en junio) por un precio de 9,95 €. Bueno, si te hiciste con el Season Pass de «Titanfall«, podrás disfrutar de «Expedition» desde ya, evidentemente. Y lo de «disfrutar» no está dicho a la ligera, porque lo de esta expansión no tiene nombre: «Titanfall: Expedition» lleva al jugador hasta una frontera alejada del campo de batalla habitual y totalmente devastada por los enfrentamientos entre la Interstellar Manufacturing Corporation (IMC) y la Milicia. Evidentemente, de lo que se tratará aquí es de que vuelvas a manejar a tu personaje de forma trepidante, corriendo y saltando de aquí para allá, haciendo carreras de parkour corriendo por las paredes y, sobre todo, robando titanes ajenos que te proporcionen ventaja en el combate. Con expansiones así, ¿quién necesita nuevos juegos?