¿Por qué deberían las mujeres llevar los auriculares sosarros tan típicos de los hombres? Skullcandy tiene la respuesta con su nueva línea femenina.
La igualdad de género está muy bien y es lo que tiene que ser, eso está claro. Pero, oye, a veces es innegable que un hombre es un hombre y que una mujer es una mujer. Y que, al fin y al cabo, todos tenemos necesidades diferentes: a un hombre háblale de camisas de leñador y a una mujer de faldas, porque si haces lo contrario pocos van a ser los que se muestren interesados. Y lo mismo es aplicable, por mucho que no muchos lo hayan pensado con anterioridad, al mundo de los auriculares. Porque, ¿qué es eso de que salgamos a la calle todos con unos auriculares grandotes negros y sosos? Parece ser que el diseño de este gadget / complemento haya apostado demasiado por la sosería elegante de la masculinidad o, cuando se pone un poco más arriesgado, por texturas preeminentemente machas, como los mimetizados o los chapados. Por suerte, desde Skullcandy han decidido que eso se ha acabado y que van a poner a disposición de las mujeres tres modelos de auriculares ante los que no van a poder resistirse.
Así lo explica Michelle Whitehead, brand manager de Skullcandy: «La verdad es hay ciertas diferencias anatómicas, acústicas, y conductuales de cómo los consumidores masculinos y femeninos experimentan nuestro producto. Nuestro objetivo era el de entender estas diferencias bastante bien para diseñar productos, partiendo de cero, que legítimamente mejoraría la experiencia de audio para nuestro consumidor femenino. Estamos sumamente orgullosos de lo que hemos logrado«. Para conseguirlo, se han hecho acompañar de atletas y embajadores olímpicos como la snowboarder Kimmy Fasani y la surfista Leila Hurst, la opinión de las cuales ha sido vital a la hora de diseñar los tres modelos de Skullcandy femeninos: los Knockout, los Bombshell y los Dime (lo que cubre una gran variedad desde los auriculares de botón hasta los imprescindibles cascos grandotes). Estampados de flores, acabados en oro rosa, adornos de tachuelas… ¿Con cuál te quedas?