Una app para los que siempre llegan tarde, otra para los adictos a las selfies y un juegazo muy original… Todo ello en nuestra nueva selección de apps imprescindibles.
Cada año nos pasa lo mismo y sabemos que nos repetimos una mala cosa… Pero, oye, es lo que hay: llega la primavera, sale el sol, hace calorcito, llegan los sudores, la gente huele a verano (y algunos a sobaca mora) y, de repente, nos vienen las ganas de salir a la calle. Y de llevar el móvil con nosotros claro. Con esto queremos decir que estos meses es, más que probablemente, la época dorada de los smartphones: es salir de casa y entrarte el gusanillo por saber cuáles son las apps que puedes bajarte para hacer más llevadera tu vida outdoors. Como siempre, nosotros queremos proponeros un abanico de apps que cubran todas vuestras necesidades: ¿una app para pillar en sus mentiras a ese colega que siempre llega tarde? La tenemos. ¿Un juego que se salga un poco de la norma? También lo tenemos. ¿Una aplicación para darle cañita brava al rollo selfie? Checked. Así que abre tu App Store y prepara tu wi-fi, porque se prevé una ola de descargas.
1. WAVE. Todos tenemos uno de «esos» amigos. Sí, «esos» que siempre llegan tarde y que, para más inri, tienen los huevacos de responderte «estoy a tres calles» cuando en verdad están saliendo de la ducha. ¡Se acabó el «estoy llegando»! ¡Se acabaron los «estoy en la rotonda»! ¡A la mierda con los «en cinco minutos estoy ahí»! Wave ha llegado para dejar en bragas a este tipo de gentuza. El funcionamiento es sencillo: esta app permite que dos contactos compartan su posición GPS durante un tiempo limitado. Tú pones el límite: desde un mínimo de 15 minutos hasta un máximo de 12 horas, cada vez que uno de los dos contactos que han compartido el Wave entre en la aplicación, verá un mapita con su propia localización y la de su amigo. Esto significa que, si un colega tuyo está llegando tarde, lo mejor que puedes hacer es pedirle que comparte un Wave y así podrás ver exactamente dónde está y calcular cuánto le falta más o menos hasta llegar al punto de vuestra cita. En serio: esta es una de esas apps que te cambian la vida… para bien. (Bueno, también te la puede cambiar para mal, pero eso significará que perteneces a esa calaña que siempre llega tarde y entonces te mereces lo peor.)
2. DARKLINGS. Una nueva entrega de nuestra sección FPApps no estaría completa sin la presencia de un juego… Pero es que, señores y señoras, estarán de acuerdo con nosotros al respecto de que la cosa está muy malita cuando se trata de hablar de juegos móviles. El motivo es, básicamente, que hace varios años que no vemos nada nuevo en el panorama. Nada «realmente» nuevo, al fin y al cabo. ¿Fue «Tiny Thief» el último gran juegazo en sorprendernos? Puede ser. Lo que está claro es que su sucesor en vicio puro y duro ha sido «Darklings«… Puede que la idea no sea tan deslumbrante, que la factura gráfica no sea un mundo multicolor de esos que te dejan picueto y puede que al final la mecánica sea repetitiva. Pero, oye, todo lo dicho también era aplicable al «Tetris» y ahí lo tienes, como el juego más jugado de la historia Y lo mismo vale para cualquier puzzle que le viniera detrás. Aclaremos las cosas: «Darklings» no es un puzzle. En este juego, básicamente eres un bichejo re-boniqui que está en el centro de una pantalla en 2D donde todo son colores blancos y negros. De un lado y de otro de la pantalla salen otros bichejos (malos) que van hacia tu protagonista: son bichejos con un símbolo en la frente, y de lo que se trata es que con tu dedazo reproduzcas ese símbolo en la pantalla del ordenador acabando el recorrido sobre el enemigo. Sólo así te los cargas. La idea es que te mantengas intacto cuanto más tiempo mejor, lo que implica que tendrás que enfrentarte a algunos bosses grandotes y también que tendrás que aprovechar todo lo que dé de sí una tienda en la que podrás ir canjeando las estrellas que desprenden los enemigos al morir por nuevos disfraces y otros boosts muy útiles. Sólo se nos ocurre una palabra para definir «Darklings«: hipnótico.
3. CAM ME. Que vaya por delante que a nosotros lo de la fiebre selfie nos parece una tontada como una casa. Pero lo cortés no quita lo valiente, y lo cierto es que todos nos hemos visto en alguna que otra ocasión en la tesitura poco honrosa de tener que hacernos una foto a nosotros mismos. Y aquí pasa una cosa: todavía no han diseñado un teléfono que esté pensando para hacerse selfies. A día de hoy, resulta prácticamente imposible sostener el teléfono con una única mano y darle al botoncito para hacer la susodicha foto sin haber estudiado antes tres años de contorsionismo en un circo chino. Por suerte, acaba de aparecer Cam Me: una aplicación que consigue que te olvides del botoncito para hacer fotos gracias a una mecánica sencillisima. A saber: encuadras de tal forma que la cámara capte tu mano y, a continuación, cuando cierres el puño escucharás el «clack» que indica que ya has sido inmortalizado. Todo muy fetén. Cam Me te permite además hacer tiras de fotos rollo PhotoBooth o montajes de esos en los que metes tu cara en fondos prefijados. Pero esto lo hemos visto mil y una veces, así que mejor nos quedamos con la facilidad de tomar selfies, que esto sí que nos parece novedoso y salvavidas.