Ante noticias como la que nos ocupa, es imposible no debatirse entre la ilusión y la perplejidad… Ilusión porque, al fin y al cabo, cualquier nuevo proyecto de David Lynch ha de ser recibido en palmitas. Pero perplejidad porque, al fin y al cabo, este es uno de esos proyectos que nos hacen exclamar «¡No hacía falta!». Pero vamos por partes: HBO acaba de anunciar que el rumor que corría desde el verano pasado de que estaba interesada en adaptar la serie británica «Utopia» no sólo era cierto, sino que incluso ya tiene al frente como showrunner a David Fincher (quien ha demostrado tener un pulso más que firme a este respecto al frente de «House of Cards«). Es más, por si este nombre fuera poco, resulta que el guión irá a cuatro manos con Gillian Flynn, autora de la novela «Perdida» y que ya ha trabajado con el director precisamente en la adaptación de su propio manuscrito (que, de hecho, se está convirtiendo en una de las adaptaciones a las que más ganas les tenemos este año 2014).
¿Y por qué nos parece esto innecesario por mucho que los nombres implicados (David Fincher, Gillian Flynn, HBO) nos parezcan más que fetén? Por un motivo muy básico: la primera temporada de la «Utopia» británica ya nos parece lo suficientemente pluscuamperfecta como para necesitar adaptación alguna (por algo se coló en el número cuatro de nuestra lista de las mejores series del 2013). Y es que el trabajo de Dennis Kelly al frente de esta serie no admite adaptaciones: supo dar con el ritmo perfecto, con la diseminación de la información ideal y con un empaque visual de esos que se te quedan en la retina pasen los meses que pasen. Así las cosas, sentimos mucho decirlo, pero ahora mismo tenemos más ganas de la (ya confirmada) segunda temporada de la «Utopia» británica que de su versión yanki.