¿DE DÓNDE SALEN? De Portland. Y prometo que estoy haciendo acopio de fuerzas para no mencionar la serie de Fred Armisen y Carrie Brownstein… Porque lo de Lovers no tiene nada que ver con esa mencionada sitcom de humor: la propuesta de estas tres chicas es pura intimidad y cercanía. Con esto no quiero decir que el humor no pueda ser íntimo y cercano, y mucho menos que Lovers no tengan sentido del humor. Lo que quiero decir es que, si tuviera que catalogar lo que hacen Carolyn Berk y sus chicas, en vez de recurrir a la palabra «humor» recurriría a algo como «una sesión de sexo con puñetazos y caricias repartidos al cincuenta por ciento». Así son las canciones de Lovers: suelen debatirse entre dos mundos (e incluso entre varios mundos), a veces entre el amor y el dolor, a veces entre lo acústico y lo electrónico, a veces entre la pasión y el desamor, a veces entre el fustigamiento y las mariposas en el estómago. En un principio, semejante montaña rusa emocional / musical estaba comandada en exclusiva por una Berk que montó Lovers ni más ni menos que en 2002, pero lo cierto es que, desde que Kerby Ferris (artista del sonido) y Emily Kingan (percusionista) se unieron a la banda de forma permanente, el sonido de este trío se ha ido haciendo más complejo y más rico en emociones. ¿Qué dices? ¿Que es absurdo de hablar de hype a estas alturas refiriéndonos a Lovers? Pues al Papa lo que es del Papa: tienes razón. Lo de Lovers no es un hype, sino una de las bandas más estimulantes de los últimos tiempos.
NOS TIENEN TÓ LOCOS PORQUE… Resulta imposible no rendirse ante una propuesta que consigue utilizar hilo de plata a la hora de coser pelajes tan diferentes los unos de los otros. Pero, ¿no nos han inculcado siempre que para conocer algo en profundidad también tienes que conocer con igual de profundidad su contrario? En su último disco, el reciente «A Friend in the World» (Badman, 2013), Lovers consiguen sonar como si el espíritu de Grimes hubiera poseído el cuerpo de Neko Case, o como si Tegan & Sara de pronto perdieran las neuronas que las hacen adictas al pop y pudieran explorar nuevos campos de sonido. Pero dejémonos de referencias: lo que practican Carolyn Berk y sus chicas pocas referencias tiene, ya que es un sonido personal e intransferible. Alguno quieren definirlo a través de su vertiente feminista o de su otra vertiente lésbica… Pero no seamos cortos de miras: el gran logro de estas chicas es haberse apropiado de una parcela emocional oscura y riquísima a la que va a costar que le agoten los recursos.
PREDICCIÓN DE FUTURO. Por ahora, el futuro próximo de Lovers es dejarnos a todos bien alelados a su paso por España. Ya han actuado en Zarautz y Bilbao, pero las dos próximas fechas de su gira se prevén repletas de emociones fuertes: Lovers actuarán hoy 20 de noviembre en Madrid (Café La Palma) y mañana jueves 21 en Barcelona (Sala Upload). A partir de aquí, la única previsión de futuro posible es que la banda de Berk por fin salga a la superficie de la escena más oculta para erigirse como una de esas bandas capaces de capturar el zeitgeist emocional de una generación. ¿Palabras mayores? Escucha cualquier canción de «A Friend in the World» y luego hablamos.
DOS Y DOS SUMAN CINCO. Grimes + una sensibilidad menos weird + Neko Case + una capacidad para matizar el dramaqueenismo = Lovers
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MIRA. «Boxer»
