Que sí, que todos estamos medio locos con la reciente fiebre gastronomista y no sólo buscamos los mejores restaurantes, sino que también intentamos procurarnos la mejor materia prima en las tiendas de productos de proximidad o de alimentos gourmet. Pero también ocurre una cosa: por mucho que queramos comer cada día de forma fetén, con un pucherazo recién hecho o algo que acaba de salir del horno, lo cierto es que la mitad de veces comemos de tupper en el trabajo. Así que, ¿por qué no hacer que el tupper sea en sí un acontecimiento? Eso es lo que piensa Mònica Escudero, quien desde el año 2012 está dándole caña al concepto en su blog A Vueltas Con La Tartera. Desde allá nos ha contagiado la voluntad de dejar de decir «tupper» y utilizar más «táper», que mola mil y es más de aquí. Pero, sobre todo, desde su blog ha ido lanzando mil y una propuestas para animar nuestros tápers y conseguir que la gente de nuestra oficina nos tenga más envidia (todavía).
Ahora, además, el blog de Mònica Escudero se ha convertido en un libro titulado «A Vueltas Con La Tartera» y publicado por Grijalbo Ilustrados. El tomo se estructura en cuatro bloques, de tal forma que cada uno cubre una temporada diferente del año y la engalana con un total de 16 recetas por temporada: son propuestas que demuestran que el táper puede contener tanto amor como un plato recién salido de tu cocina, pero Escudero tampoco olvida incluir algún bocadillo para los días más vagos y algún postre para las celebraciones de alto copete. Por si esto fuera poco, el libro va acompañado de un táper para todos aquellos que acaben de llegar a este mundillo, así no tendrán excusa para no llevarse la comida a la oficina. La revolución gastronomista por fin llega a tu táper. Gracias, Mònica.
