No vamos a descubrirle Veronica Falls a nadie ahora y, sobre todo, no vamos a pretender que nuestro amor por esta banda es algo nuevo… Mucho tiempo llevamos hablando de esta formación que nació en 2009 cuando Roxanne Clifford y Patrick Doyle (antiguos miembros de Sexy Kids) unieron fuerzas a James Hoare (que venía de Your Twenties) y Marion Herbain (amiga de los dos primeros) para darle mucha caña al dream-pop ochentoso. Su primer disco, el homónimo «Veronica Falls» (Slumberland 2011), supuso un buen baño de lluvia fresquísima para un género que empezaba a dar preocupantes muestras de sequía. Sus estructuras sustentadas sobre guitarras que, pese a su fuerza, consiguen sonando etéreas eran su mejor baza para que el mundo entero se rindiera a sus pies, pero es que Veronica Falls nunca pretendieron quedarse ahí y siguieron experimentando con los juegos de voz (sacándole mucho jugo al rollito chica / chico que remite indudablemente a los Vaselines) y los estribillos cristalinos que te enganchan por el estómago y ya no te sueltan. Buena prueba de lo dicho es el nivel del que es su segundo trabajo, ese «Waiting For Something To Happen» (Slumberlarnd, 2013) que ya lleva varios meses sonando en nuestros reproductores como prueba definitiva de que lo de estos chicos no fue una tormenta de verano de esas que pasan y te has olvidado a los cinco minutos.
Pero repetimos: no le vamos a descubrir Veronica Falls a nadie y nuestro amor ya tiene varios años… Lo que no habíamos tenido todavía era la oportunidad de toparnos con ellos en una primera cita para conocerlos un poco en la intimidad. Por suerte, su recientísimo paso por El Garito de Converse nos brindó la posibilidad de que Roxanne Clifford respondiera a las preguntas de nuestro Fast Date.
1. Esto es una cita rápida: descríbete en tres palabras. Divertida, voluble, fantasiosa.
2. Describe también tu música en tres palabras. Primigenia, melódica, con corazón.
3. Si pudieras obligar al mundo entero a que escuchase un disco en concreto, ese sería… «Power, Corruption and Lies«, de New Order.
4. ¿Último disco que compraste y que, además, te emocionó? «Eyes Rind As Is Beggars«, de The Garbage and The Flowers.
5. ¿El disco que esperas con más ganas para los próximos meses? «Electricity By Candlelight«, de Alex Chilton.
6. ¿Qué música llevas siempre que viajas en coche? «Bubblegum Perfume«, de Felt.
7. Hay un disco de tu mayor ídolo que no te gusta nada pero que siempre defiendes por lealtad. Y ese disco es… «Marble Index«, de Nico.
8. ¿La red social que no entiendes y en la que nunca te crearías un perfil? Twitter.
9. El primer póster que pegaste en la pared de tu habitación era de… The Stone Roses.
10. ¿En qué festival o concierto te avergüenzas de no haber estado como espectador? Me avergüenza haberme perdido a Morrissey la última vez que actuó en mi ciudad, pero alternativamente también me avergüenza haber visto a Billy Bob Thornton cuando era una adolescente (fue porque me dieron entradas gratis).
11. La cosa más rara que te ha pasado en un concierto (tuyo)… Una vez que alguien me tiró un zapato.
12. ¿Una canción, película o libro inconfesable? «Bette Davis Eyes«, de Kim Carnes.
13. ¿Serie de TV favorita? «Friends».
14. ¿Con qué personaje de ficción te lo montarías? Con Beetlejuice.
15. ¿A qué celebridad muerta habría que resucitar? A Truman Capote.
16. ¿A qué personaje real (que no sea tu pareja) elegirías cuando se acabara el mundo para acabar solos y mejorar la especie (o no)? A Winona Ryder.
17. Algo que no puede faltar nunca en tu casa… Mi jersey de cachemira.
18. Algo que nunca entraría en tu casa… Un lavaplatos.
19. Sientes un flechazo inmediato ante las personas que… son divertidas y generosas.
20. Lo primero que preguntarías en una Fast Date sería… No sé qué preguntaría, pero querría que esa fast date fuera con Bill Murray.