Permitidnos un momento para la nostaligia: cierta facción de la redacción de FPM perdió parte de su post-adolescencia en cierto bar de Barcelona (abierto a finales del siglo XIX y mantenido tal cual desde entonces… incluso en lo que respecta a la higiene, ya que aquel lugar no había visto un trapo en su puñetera vida) donde la especialidad fue, es y será la absenta. No es que nos flipara el rollo por culpa de «Drácula» y Gary Oldman, no: lo nuestro era aquello de buscar al hada verde que más tarde retrataría tan bien el peliculón «Moulin Rouge!«. ¿Y por qué nos hemos puesto a recordar tal cosa? Básicamente, porque nos hemos enterado de que La Fée Parisienne llega a España: fue la primera absenta tradicional destilada tras la prohibición de 1915, además de poder fardar de ser la única aprobada por el Musée de l’Absinthe. Por algo será. Está compueta de ajenjo, varios tipos de anís, hisopo e hinojo; y su destilación se realiza en un alambique de cobre siguiendo los métodos tradicionales y cuidando al máximo la maceración. Vamos, todo como la más tradicional de las absentas pero con el cuidado por el detalle del siglo XXI. Sus aromas intensos, harmoniosos y abundantes la convierten en un aperitivo ideal, servida siempre en su tradicional fuente, con un azucarillo y diluída en de 4 a 6 partes de agua. Y no te lo pierdas: ¡es ideal para utilizar en cócteles! A partir de ahora, podremos revivir aquellos maravillosos años de post-adolescencia en nuestras propias casas gracias a La Fée Parisienne.