Era cuestión de tiempo: en esta carrera que ya hace varios años que lleva a todas las ginebras a alardear de Premium estaba cantado que, tarde o temprano, sería su «compañera del alma» la que también sentiría la necesidad de hacerse con la mencionada etiqueta. Y con lo de «compañera del alma» nos referimos, evidentemente, a la tónica… Así que nadie debería extrañarse de que ME Tonic desembarque en España con la palabra Premium ondeando bien alta, porque la verdad es que cualidades no le faltan para poder alardear de semejante etiqueta.
Para empezar, en su proceso de creación participaron más de veinte maestros cocteleros, obteniendo finalmente una receta en la que destacan la utilización del yuzu japonés (fruta de la región nipona de Wakayama, lugar espiritual en el que la naturaleza se venera como un bien sagrado), por su alto contenido en quinina y por sus sutiles notas de pimienta negra. El conjunto es tan personal y arrebatador que, finalmente, ME Tonic destaca por encima de otras tónicas porque consigue dejar de ser el «compañero del alma» para ser la protagonista: más allá del Gin Tonic y el Vodka Tonic (para los que es ideal), ME Tonic incluso puede ser degustada y disfrutada por sí sola. Sus creadores recomiendan tomarla como refresco bien frío y poniendo una rodaja de lima en el cuello de su botella. Aí que ya sabes: una tónica ideal para combinarla en los días de fiesta… y para cuidar el estómago al día siguiente.