Sabato de Sarno protagoniza su primera polémica al frente de Gucci: el diseñador presenta su primera colección de hombre… y la gente opina que se ha pasado de comercial.
Es fácil imaginar que lo de Sabato de Sarno como nuevo director creativo de Gucci está siendo un verdadero dolor de cabeza para el diseñador. Al fin y al cabo, lo suyo es como aquella tortura medieval en la que dos caballos tiraban de un cuerpo humano en diferentes direcciones… hasta que ocurría lo inevitable.
En este caso en concreto, los dos caballos están mucho más que claros. Por un lado, está el público fiel al trabajo de Alessandro Michele en Gucci, que espera que la firma siga explorando las constantes estéticas que le han encumbrado a lo más alto del firmamento quirky. Y, por otro lado, está la propia casa Gucci, que supuestamente partió peras con Michele precisamente porque este se negaba a redirigir su chorreo creativo hacia unos cauces más comerciales.
Así llegamos precisamente al primer gran drama de Sabato de Sarno dentro de Gucci, que ha tenido lugar justo cuando la colección de hombre que ha presentado en la Milan Fashion Week ha chocado frontalmente contra la opinión pública. ¿Qué dice la gente? El veredicto general ha sido mucho más que claro: esta colección es tan comercial que, de hecho, bien podría acabar siendo anti-comercial debido al rechazo que causa ante un público que espera otra cosa. Es decir, que espera una continuación de la estética de Alessandro Michele.
Por su parte, ¿qué dice Sabato de Sarno al respecto? Básicamente, dice que esta colección se llama «Ancora» de forma nada casual. Al fin y al cabo, «Ancora» puede traducirse como «otra vez» o «de nuevo» y esa es la intención del diseñador: revisitar la herencia de la maison desde un punto de vista disfrutón. Pero, sobre todo, ese «de nuevo» adquiere mayor significancia si tenemos en cuenta que absolutamente todos los looks de esta colección de hombre son trasposiciones directas de la última colección de mujer de Gucci.
La gente dice, Sabato de Sarno dice… ¿Y cuál es el veredicto final? Pues, obviamente, hay que reconocer que lo de hacer versiones masculinas de las prendas de mujer implica que esta «Ancora» ha sido pensada y tiene cierto concepto detrás. ¿Es suficiente este concepto? Va a ser que no. Y va a serlo por dos motivos: porque este rollo masculino / femenino es un paso atrás después de que Michelle consiguiera que Gucci trascendiera las barreras del género y, sobre todo, porque da igual que la mona se vista de seda, demasiado comercial (y básico) se queda.
Más información en la web de Gucci.