El regreso de Slowdive no se va a quedar en una anécdota: hay nuevo disco de camino y suena tan esperanzador como este temón llamado «kisses».
El regreso de Slowdive tras 22 años de sequía creativa con “Slowdive” (Dead Oceans, 2017) demostró que el grupo británico había conservado intactos su sentido y su sensibilidad a pesar de haber vivido tan extensa pausa. De hecho, aquel disco presentó la mejor cara posible de la banda en aquel momento (tanto en estudio como en directo, el cual ya habían reactivado en 2014) para dar continuidad a “Pygmalion” (Creation, 1995), el disco que los había enviado al limbo.
El mucho más que digno contenido de su cuarto álbum reflejaba la expansión de los límites del universo de Neil Halstead, Rachel Goswell, Christian Savill, Nick Chaplin y Simon Scott con ímpetu shoegaze pero manteniendo su característica fragilidad dream-pop. Y entre esas coordenadas se sitúa “kisses”, el nuevo single de Slowdive y avance de su próximo trabajo, “everything is alive” (Dead Oceans, 2023), que despeja cualquier duda sobre si el retorno discográfico del quinteto se iba a quedar en flor de un solo trabajo a la manera de My Bloody Valentine con “m b v” (m b v, 2013).
Sustentada en una dulce aleación de ritmo uptempo y delicadeza melódica y lírica, “kisses” es otra muestra más del hechizo que crean las voces de Neil y Rachel, que se entrelazan en su etéreo estribillo mientras los acordes eléctricos caen suavemente como gotas de cristal.
Tratándose de Slowdive, resulta sencillo creer que la banda podrá mantener la línea positiva iniciada hace seis años que le lleve, como mínimo, a igualar el resultado final de “Slowdive”, que acabó colocado entre los más destacado de su carrera. El 1 de septiembre, cuando se publique “everything is alive”, será el día de comprobar si, una vez más, por Slowdive no pasa el tiempo.
Más información en la web de Slowdive.