Reconozcámoslo: toda alma sensible necesita, de vez en cuando, una buena ración de mamporros y sangre y visceras y cargarse bichos que superan tu masa corporal en una relación de cuatro a uno. Será por eso que, por mucho que escuchemos a Beach House y nos caiga una lagrimita, de tarde en tarde nos sale la vena de coger el mando de nuestras consolas y disparar a diestro y siniestro. Para este tipo de cometidos, hay que dar la bienvenida a juegos como «Lost Planet 2«. Su primera parte, considerada de culto desde su propio lanzamiento (será por eso que no armó tanto revuelo como se suponía que armaría), se basaba en las premisas expuestas al principio de este párrafo: bicharracos enormes, armas gigantescas, mapeados mastodónticos… y personaje jugable del tamaño de tú y yo. Y eso es lo que vamos a tener, pero en doble ración, con la llegada de la secuela, que estará a la venta en nuestro país a partir de mañana 11 de mayo. Échale un vistazo al trailer y si no te vienen ganas de aplastar cabezas de alienígenas… no sé… sigue escuchando a Beach House. Pero que sepas que tarde o temprano petarás por algún lado.