Friska Viljor vienen a demostrar que en Suecia hay vida más allá de las discográficas Labrador y Sincerely Yours… No es que sean unos recién llegados: Daniel Johansson y Joakim Sveningsson se constituyeron en banda en 2005 para superar sus respectivas rupturas amorosas y, a partir de entonces, han firmado tres discos bajo una promesa que no sabemos cuánto tendrá de cierto. Según cuenta la leyenda, se propusieron no componer nunca en estado sobrio. Por eso mismo sorprende que en sus canciones no haya ni rastro de los estragos que suelen acontecer al juntar bebercio y música. El mejor exponente es, sin duda, «For New Begginings» (Crying Bob / Green Ufos, 2010): un álbum (que presentará estos días en España) en el que un sentido de fiesta pop bastante canadiense se filtra en la melancólica alegría sueca para abofetear a todo aquel que, a estas alturas, siga pensando que los nórdicos son aburridos. Ahondando en esa línea, les hemos pedido a Friska Viljor que se marquen un «9 songs» que nos descubra las bandas imprescindibles de la escena sueca menos internacional.
1. «Känn Ingen Sorg För Mig Göteborg», de Håkan Hellström. «El artista de pop eufórico más grande de Suecia. Este es su primer single y nos sobrepasó como nada que haya hecho en años. ¡Parecía que esta canción era motivo suficiente para volver a amar la música de nuevo! No sabemos exactamente de qué va la canción… las voces semi falsas la energía purísima que desprende. Este tipo ha lanzado cinco álbums y todavía no tiene NI UNA canción mala. ¡Todo lo que hace se convierte en oro!»
2. «Calleth You, Cometh I», de The Ark. «Grand pop desde una película que trataba de una reunión de antiguos alumnos. La nostalgia que nos remite a cuando estábamos en la escuela y todo parecía tan claro con respecto a quién eras (y para quén lo eras) y dónde estabas en la jerarquía entre tus colegas adolescentes. Ahora, al escuchar la canción de nuevo, nos remita a relaciones pasadas que fueron y siempre serán parte de tu corazón.»
3. «I´ll Be Gone», de Broder Daniel. «Una banda de culto de vuelta a casa con líneas de guitarra masivas y un cantante con una expresión distinta a lo habitual. Esta canción estaba en la banda sonora de una peli que era LA PELI: «Fucking Åmål». Letras oscuras y música sugerente. ¡Maravilloso!»
4. «Allt Dom Bygger Upp Ska Vi Meja Ner», de Florence Valentin. «Un «progpopartist» contemporáneo con letras políticas. ¡El estribillo de esta canción es fantástico! Con la sección de viento y las voces de fondo… ¡Sólo puedes adorarla! Una cancion veraniega que te provoca ganas de saltar y gritar y reir y bailar y amar y todo lo que significa sacar hacia fuera la frustración que tienes dentro.»
5. «Västra Frölunda», de Kristian Anttila. «Una canción animada con una línea de guitarra realmente rápida. Es muy refrescante con las guitarras y la velocidad, pero aun así sigue siendo muy muy melódica. El estribillo aquí también es genial».
6. «Mon Amour», de The Plan. «Pop loco en speed. Todo el disco en el que está esta canción lo escuchamos cada día durante casi un año. Es un álbum fantástico que deberíais comprar ahora mismo. Esta canción es un tema loco con la energía de una estampida de toros. Hicimos un viaje por carretera con un amigo y este era el único disco que teníamos, así que se convirtió en algo muy importante. También es cierto que recuerda a chicas, fiestas y todo lo que te puedas imaginar rodeando a estas dos cosas.»
7. «Don´t Let The Devil Ruin It All», de Timo Räisänen. «Timo salió de la banda de Håkan Hellströms con este single maravilloso que es una canción de pop puro. Perfecta para el verano y para caminar por la preciosa ciudad de Estocolmo mirando a gente bonita.»
8. «Det Snurrar I Min Skalle», de Familjen. «Electro REALMENTE «dancefriendly» desde el sur. Sintetizadores duros que hacen que tu cuerpo se mueva nerviosamente. Es imposible quedarse quieto, ya que la canción invita a todo el mundo a una gran fiesta en la pista de baile.»
9. «Always a releaf», de The Radio Dept. «Pop melancólico con sintetizadores y guitarras muy agradables. Para nosotros, estos chicos son los maestros de las líneas oscuras pero melódicas tanto en guitarra como en bajo o teclado. Esta canción hace que tu mente vuele hacia algún lugar lejos, muy lejos, hasta el fondo del mar o incluso la luna. A algún lugar donde puedes sentarte en silencio y estar rodeado de la nada absoluta, el silencio y tú mismo.»