Conocer tus referentes es imprescindible… Y por eso «¡Libérate!» de Valeria Vegas es lectura obligada para la comunidad LGTBIQ+.
Existen muchos manuales para la comunidad LGTBIQ+. En general, está claro que la industria literaria está exprimiendo como si no hubiera un mañana el nuevo boom de la no ficción. Pero, en el caso de la comunidad LGTBIQ+, lo está haciendo siguiendo dos tendencias muy particulares. Y no me estoy refiriendo a todos los libros que llevan la firma de esos influencers y personalidades cuya proyección en redes sociales les ha proporcionado una invitación en firme desde las editoriales para publicar tomos que se venden de la misma forma que se venden tazas, camisetas o cualquier tipo de merchandising destinado a fans de estos ídolos de la era digital.
Me estoy refiriendo más bien a otras dos tendencias… Por un lado, está el manual de autoayuda que, como se presupone en toda literatura de autoayuda, ataca directamente a las debilidades y penurias del comprador potencial para dirigirle hacia una lectura en la que realmente encontrará más tópicos que ayuda real. Y, por otro lado, están estos otros libros que se apoyan en las preocupaciones sociales del momento (siempre avaladas por el consiguiente hashtag: #gaytoo, #blacklivesmatter, etc.) para alimentar la bestia del victimismo y del «mirad, ya os decíamos que la comunidad no está tan bien como nos quieren hacer pensar» y del «siéntete mal, porque tienes motivos para sentirte mal«. Que, a ver, no digo yo que estemos bien. Que no digo que no queden todavía muchas cimas por conquistar para la comunidad LGTBIQ+. Pero ¿quién está bien en un siglo 21 que le está dando collejones a absolutamente todo el mundo independientemente de su condición?
A lo que me refiero es que, en ambos casos, existe una alarmante tendencia a la simplificación de esquemas y proclamas, a una superficialidad que es lo que vende porque, como dice el meme, «ain’t nobody got time for that«. Siendo «that» aquí lo mismo que «meterse hasta las trancas en el lodazal de los problemas reales para abordarlos de forma vertical -es decir: en profundidad- y no de forma horizontal -es decir: en su superficie-«. Uno de los grandes culpables de todo esto es, obviamente, la forma: si los compradores potenciales son los que pueblan las redes sociales, ¿cómo vas a enfrentarte a ellos con un idioma sesudo y académico capaz de aburrir a tu profesor de historia del instituto?
Por suerte, dentro de este panorama, siempre surgen voces capaces de elevar el listón y, con un poco de suerte, liderar un cambio de tendencia. Al respecto de los manuales de ayuda, por ejemplo, tenemos en nuestro país a autores como Gabriel J. Martín, que ha demostrado que se puede hablar de sexualidad gay (y, de hecho, ayudar a superar múltiples patologías incrustadas en la psique homosexual) con un lenguaje que no es ni de la calle, sino que directamente es de conversación de amigas. Y, si hablamos del segundo tipo de manuales, ¿por qué no huir de la esclavitud del presente y de los hashtags y, directamente, hacer algo que no estamos haciendo lo suficiente: conocer nuestro propio pasado?
Cuando me enteré de que Valeria Vegas iba a publicar «¡Libérate!» (en la editorial Dos Bigotes, que ya había publicado su anterior «Vestidas de Azul«), experimenté un sincero subidón. Al fin y al cabo, en los últimos meses había empezado a reflexionar seriamente sobre algo que me preocupaba… Desde que vi la docuserie «Visibilidad: LGTBI en la televisión» en Apple TV+, venía observando cuánto sabemos todos de la génesis de la cultura gay yanki pasada (sus referentes LGTBIQ, Marsha, Sylvia, Stonewall, cómo afectó el VIH al gay medio americano en los 90, los balls, el vogue, esas cosas) y lo poco que sabemos de la nuestra propia.
¿Por qué? Porque en nuestro país no faltan figuras que se dediquen a reivindicar todos estos referentes, pero sí que faltan figuras capaces de hacer llegar estos mismos referentes a las nuevas generaciones. Y ahí está el motivo de mi subidón: ¿quién mejor que Valeria Vegas para dar una lección de historia de cultura LGTBIQ+? Desde su propio subtítulo, «¡Libérate!» se anuncia como una apasionante sesión de buceo en las oscuras aguas de «La cultura LGTBQ que abrió camino en España«.
Y basta un vistazo rápido hacia su interior para advertir que el primer acierto de Vegas es la propia estructura de su libro: un diccionario de la A la Z en el que quedan representados todos los colores de la cultura LGTBIQ+ o, como escribe la propia autora en la introducción, «la relación de artistas, películas y canciones que abrieron camino a la cultura LGTBQ en España«. Esto significa que la lupa de Valeria se centra el arco temporal que va desde los años 70 hasta los 90 del pasado siglo XX. Y, aunque el glosario incluye célebres nombres previos a los 70 sin los que sería imposible entender el imaginario LGTBIQ+ español (Miguel de Molina y similares), acaba obviando casi por completo el siglo 21 porque, reconozcámoslo, eso daría para otro nuevo libro.
El segundo gran acierto del «¡Libérate!» de Valeria Vegas es, precisamente, que el corte para decidir qué entra y qué no en este glosario viene proporcionado por la visión personal de una autora que tiene un conocimiento enciclopédico de lo que está hablando. En el libro conviven referencias imprescindibles y sobradamente conocidas (¿cómo no iban a constar aquí nombres como La Agrado, Bibiana Fernández, Nazario, Rocío Jurado, Sara Montiel, Pedro Almodóvar o La Veneno?) con muchas otras que resultan casi oscurantistas y en las que se intuye un trabajo de documentación apasionado y exhaustivo. De esta lectura saldrás con una hoja de ruta para ver un buen puñado de películas y escuchar a un buen surtido de artistas que te harán entender mucho mejor la comunidad en la que te mueves.
Esto tiene mucho que ver con el tercer gran acierto del libro: exponer sus referentes en la justa medida. Es obvio que hay entradas en las que Vegas se puede explayar y se explaya más que en otras… Pero también sabe cuándo echar el freno: no esperes grandes disertaciones sobre La Veneno y sobre «Vestida de Azul«, porque para algo Valeria ya ha escrito un libro al respecto de cada una de ellas. Y no solo eso: la mayoría de entradas son una gozada porque la autora sabe desplegar su conocimiento con brío y seleccionando no solo lo más relevante, sino también lo más curioso y peculiar. Vegas va tejiendo una tela de araña que luce los colores del arcoíris y en la que da gusto quedarse totalmente enganchado.
El cuarto y último gran acierto de Valeria Vegas en «¡Libérate!«, sin embargo, es precisamente el que la distingue como una de las lecturas imprescindibles de los últimos (y, sobre todo, los próximos) años en nuestro país: su capacidad para convertirse en una verdadera celebración. Porque este libro no va (solo) de dejar al descubierto las penurias por las que ha pasado la comunidad LGTIBQ+ en su historia reciente, sino que entrelaza esa reivindicación con una celebración de todo aquello que va trenzado en nuestro ADN. Ya sabes: conocer el pasado es una forma de evitar tropezar con las mismas piedras en el futuro.
Pero no solo eso: conocer el pasado es lucir con orgullo los galones que muchos pioneros se esforzaron por conseguir en un panorama tan adverso como el tardofranquismo y las primeras décadas de la democracia española. Porque ya basta de que, gracias (y un poco por culpa) de RuPaul, conozcamos más referentes de la cultura yanki LGTBIQ+ que de nuestra propia cultura. Es hora de que cantemos más el «¡Libérate!» de El Titi y menos (solo un poquito menos) Gloria Gaynor. [Más información en el Instagram de Valeria Vegas y en la web de Dos Bigotes]