Samantha Hudson acaba de publicar su «Grandes Éxitos»… Así que, en la -primera- cumbre de su carrera, es el momento ideal para entrevistarla.
Samantha Hudson acaba de lanzar su «Grandes Éxitos«. Y no es que esta diva post-moderna (bueno, más bien post-todo) tenga una carrera de varias décadas y finalmente haya decidido plegarse a las exigencias de su discográfica y de sus fans y lanzar un recopilatorio con sus mayores hits. Ni mucho menos. «Maricón«, su primer temón además de su mayor éxito, se convirtió en un fenómeno viral a finales de 2015. Y, de hecho, ayudó a poner en el mapa tanto a Samantha Hudson como a Iván González, ese chaval al que todos adoramos al ofrecer uno de los discursos de graduación más necesarios y elocuentes de todos los tiempos.
Después vino todo lo demás: otros temones como «Burguesa Arruinada«, «Chicote» (donde le declaraba amor eterno al chef televisivo), «Super Preñada» o la reciente y bastante destroyer «Cómeme El Coño«. También vinieron su viaje desde Palma de Mallorca hasta Barcelona, la vida nocturna, su amistad con Selena Winters, el preocupante accidente al intentar salir de una casa por el balcón y acabar estampándose contra la calle… Y las redes sociales. Obvio. Instagram como canal 24h en el que seguir sus vivencias y sus ocurrencias, porque Samantha no se guarda nada para ella. Lo comparte todo.
En los últimos meses, Samantha Hudson está viviendo una segunda juventud (si se puede decir esto de alguien que acaba de cumplir los 20). El documental «Samantha Hudson» de Joan Porcel ordenó su corta pero intensa historia y le devolvió el estatus de estrella. Se mudó a Madrid y allá no para de crecer. Y, de forma más cercana, el próximo viernes 12 de abril será la madrina de ese Futuroa Sarao Drag (en La [2] de Apolo) que lleva ya varias temporadas ofreciendo un Drag Race alternativo de espíritu irreverente. Antes de eso, es necesario hablar con Samantha de Samantha. Y de sus «Grandes Éxitos«. Y de todo lo que se le ponga por delante.
Empecemos por el principio… ¿Te imaginas cómo sería tu vida si no hubieras hecho “Maricón” y se hubiera convertido en el éxito que fue? Me he hecho esa pregunta en numerosas ocasiones y no tengo una respuesta concreta. Pero, definitivamente, no seria quien soy hoy si no hubiera hecho aquel video. Han pasado muchas cosas desde «Soy Maricón«, me he desarrollado como persona y he construido mi personalidad en torno a Samantha.
Lo interesante de aquel temazo es que, más allá de la excusa musical trash, incluía una reivindicación de orgullo queer realmente refrescante en su equilibrio entre lo reivindicativo y lo cachondo. ¿Es ese equilibrio el corazón de Samantha Hudson? Sí. Yo soy una persona muy sincrética y, por lo general, siempre me encuentro dividida en dos polos opuestos que van tirando el uno del otro: soy femenina pero también masculina, tengo mucho sentido del humor pero también me gusta tener un discurso mas allá de la parodia, soy el extremo y lo barroco pero también una chica muy sencillita… Creo firmemente que en el equilibrio está la virtud, y estoy muy contenta de verme reflejada en eso.
También hay en Samantha mucha beligerancia, mucha rabia. ¿Eso es algo que no pasa con el tiempo y que sigue ardiendo en ti pase el tiempo que pase? La rabia, como todas las emociones, es algo pasajero y periódico que me va y me viene. La cuestión es que, por razones obvias, me toca lidiar con muchos cretinos a lo largo del día. Y hay veces que paso de todo y otras veces que no estoy para trotes. Pero es que es normal ¿Cómo no vas a sentir ira cuando estás expuesta a situaciones denigrantes constantemente?
Con “Maricón” empezó tu compleja relación con la fama: después de un éxito como aquel, ¿es jodido mantener el nivel? La fama es una lacra. Hay que tener en cuenta que yo era una tierna novicia de 16 años cuando di el boom y, debido a mi edad, tuve que rechazar muchas oportunidades. He tenido temporadas de obsesionarme mucho con eso, pero ahora estoy tranquilita (supongo que porque he vuelto un poco a ese éxito). Sin embargo, creo que todo pasa por algo… Y la noche madrileña es muy complicada. Me habría ido fatal si hubiera seguido con aquello en 2016
Al verte en el documental de Joan Porcel, me dio la sensación de que asumías que, tras aquel éxito, tu estrella se ha ido apagando y que ha sido un poco por culpa de ciertas decisiones personales… ¿Es así? Tampoco creo que me haya ido apagando: soy mas bien una lampara regulable, y ha habido momentos donde he bajado la intensidad y otros donde me he esforzado mucho por alumbrar cada rincón. De todas formas, nada ha sido una decisión premeditada, sino mas bien el resultado de ciertas circunstancias que me ha tocado vivir.
De hecho, me fascina cómo no tienes filtro a la hora de hacer públicas en redes esas decisiones personales, tu vida en general. ¿Hay algún límite de lo que enseñarías o dirías en redes sociales? No tengo nada que esconder y me sobra descaro.
¿Por qué crees que en tu generación hay esa facilidad para exponerse que no existe en generaciones anteriores? Por las redes sociales. Internet nos ha dado la facilidad de compartir información de una manera sorprendentemente rápida y sencilla. Es una herramienta muy poderosa.
¿Cuál ha sido la mayor felicidad que te han dado las redes? La fama, que la gente quiera escuchar lo que tengo que decir
¿Y cuál es el mayor disgusto que te han dado las redes, ese que casi te hace desaparecer para nunca volver? Lo mismo que he respondido en la pregunta anterior.
Incluso convertiste tu accidente en un espectáculo público que nos preocupó a muchos… hasta que vimos que tú mismo te lo tomabas con humor. Aun así, fue algo grave. ¿Fue un momento de replantearte qué estabas haciendo con tu vida? Evidentemente, que me ingresaran por riesgo de meningitis durante siete dias en un hospital no es algo divertido. Pero en situaciones limites suelo recurrir al humor para restarle importancia y controlar los nervios. Tirarme de un balcón supuso un cambio muy importante, porque me hizo reflexionar y decidir hacia dónde encauzar mi vida.
Esto es algo que también se veía en el documental de Porcel: que tu familia tampoco llevaba demasiado bien tu figura pública. ¿Cómo está el tema? Mi familia lo que no llevan bien es que me exponga públicamente, porque tienen miedo de que pueda sufrir una agresión. No obstante, ellos siempre me han apoyado muchisimo y estoy muy agradecido porque no es algo que sea habitual. En cualquier caso, me pueden pegar vaya hecho un circo o no, así que prefiero ponerme mis vestidos y mis accesorios y que sea lo que Dios quiera.
¿Cómo te está tratando Madrid? ¿Estás consiguiendo allá lo que se te escapaba un poco en Barcelona? Madrid me ha acogido con los brazos abiertos. Es definitivamente mi ciudad, aunque a veces tenga un regustillo agridulce.
Samantha Hudson acaba de lanzar su primer álbum… Y es directamente un «Grandes Éxitos». ¿Se puede tener más morro, tía? Si no se tiene morro en esta vida, ¿qué se tiene? Y a mí me gusta llamar a las cosas por su nombre.
¿Significa esto que le das importancia al formato álbum (yo creía que vuestra generación ya pasaba de este tipo de cosas) y que trabajarás en un disco que no sea un «Grandes Éxitos»? Yo soy una mujer muy chapada a la antigua ademas de una Virgo empedernida, y un álbum es muy practico para tener mi basura ordenada. Y, sí, mi plan de futuro es sacar algún que otro single y un nuevo disco.
Una última cosa que me pareció muy reveladora en el documental de Porcel es que Samantha puede acabar dejando paso a otros personajes con los que explores otras llagas sociales en las que meter el dedo… ¿Hay muchos personajes viviendo dentro de Iván? Iván y Samantha son solos dos nombres que hablan de la misma persona. No es que haya muchos personajes dentro de mí, es que yo soy de muchas formas. Como todo el mundo.
Entonces, ¿te imaginas a Samantha envejeciendo o dará paso a otras personas? No lo sé. Ya lo dirá el tiempo. Aunque este verano me tatué Samantha en el pubis, así que voy jodida.
Esto me lleva, además, a otra cosa que me alucina en ti: entre Samantha, Ivan y el resto de los personajes, ¿es extraño si te pregunto en qué parte del espectro de género te consideras? ¿O cada uno de los personajes está en una parte del espectro diferente? Yo soy una chica normal… Bueno, casi chica y casi normal.
De hecho, ¿te parecen interesantes y relevantes las cuestiones de género? ¿Es algo que quieras explorar de forma consciente? Yo no hago nada de forma consciente: me limito a hacer y, luego, si me veo con fuerzas, intento encontrarle el motivo. Pero, desde luego, el género es un tema muy recurrente en mi vida.
Para acabar, entonces, ¿qué es lo próximo para Samantha? Con llegar sana y salva a los 21 me doy por satisfecha. [Más información en el Instagram de Samantha Hudson y en el evento de Facebook del próximo Futuro Sarao Drag]