Laskaar es el Drake español, pero también tiene mucho de The Weekend, Woodkid e incluso FKA Twigs… Y en este artículo te lo expilcamos todo sobre él.
¿DE DÓNDE SALE? Si lo primero que escuchaste de Laskaar fue «Never Met You«, «DNA» o «Drunk«, lo más probable es que pensaras que este hombre es el nuevo fichaje de OVO y que en tres, dos, uno tendríamos a Drake promocionándolo como si no hubiera un mañana. Pero, por el contrario, si lo primero que escuchaste de Laskaar fue su temazo «Traición«, no sería de extrañar que te diera por pensar que nos encontramos ante un nuevo cachorro de la escena nu-r&b española capaz de convertirse en una estimulante versión de C. Tangana a rebosar de soul. Ambas percepciones están equivocadas… y, a su vez, tienen algo de cierto.
Y es que los padres de Laskaar son andaluces de pura de cepa, de Granada para ser más exactos… Pero él nació y se crió en Suiza. Lo que viene a significar que, cuando visita España o cuando canta en castellano, entre sus labios se desliza sensualmente un acento con toques andaluces que resulta arrebatador. Y lo que viene a significar, al fin y al cabo, que este chaval nacido bajo el nombre de Óscar es capaz de cantar en inglés como si fuera un nativo (digno de fichar en OVO, por lo tanto) o en castellano como si hubiera nacido aquí (que, para el caso, y con lo que nos gusta aquí barrer para casa, casi casi casi puede considerarse que así ha sido).
Un último dato interesante antes de entrar en materia con Laskaar: ¿por qué este nombre tan exótico? Cuenta la leyenda que, fascinado con ese momento de «La Historia Interminable» en el que, para salvar Fantasia, la Emperatriz Infantil debe recibir un nuevo nombre, Óscar le pidió a Santa Claus eso mismo: un nuevo nombre. Sus padres le regalaron un Oskaar que, más tarde, él mismo transformaría en Laskaar en una declaración de intenciones que deja claro que su carrera solo hay alguien que la vaya a escribir: él mismo, en sus propios términos. Y son unos términos realmente elocuentes y originales que ya han abierto una ostentosa brecha en la actualidad musical.
NOS TIENE TÓ LOCOS PORQUE… Aquí y ahora, su propuesta es única, personal e intransferible. Sus primeros temas hacían pensar en la fusión pluscuamperfecta entre la rítmica implacablemente sensual de Woodkid y la voz hedonista, nocturna y supurantemente seductora de The Weekend. «Drunk» exploró unos future beats de aromas viajeras, y en «Traición» abrazó sus raíces españolas y consiguió entrelazar los aires latinos con un sublime deep house digno de los mejores Disclosure. ¿Esta acumulación de nombres todavía no ha hecho que te enamores profundamente de Laskaar?
Pues entonces deja de escuchar (por ahora) y ponte a mirar… Porque es que el imaginario que este chaval ha ido construyendo poco a poco no podría ser más estimulante. Vuelvo a poner un nombre mayúsculo sobre la mesa: FKA Twigs. Pero es que la estética que Laskaar explora tanto en su impecables e imprescindibles videoclips como en todas y cada una de las fotos en las que posa tiene mucho que ver con la sensibilidad casi post-humana y futurista de esa FKA Twigs que recientemente incluyó a Metieres Fecales en su colaboración con A$AP Rocky para el videoclip de «Fukk Sleep«.
De nuevo, algo hay de Matieres Fecales en un Laskaar que tan pronto tira abajo los límites de la moda masculina y de la apariencia humana (algo para lo que ha encontrado una cómplice excepcional: Soraya Rosales) como que abraza esa masculinidad vulnerable del nuevo siglo que tiene a Drake como máximo exponente. Y prometo que este es el último nombre ilustre de todo el lote, pero es que, al hablar de Laskaar, resulta imposible no pensar en Drake y en cómo lleva varios años explorando los límites de la masculinidad a través de su propuesta (tanto musical como estética). ¿Es Laskaar el Drake español tal y como he escrito en el título de este artículo? Yo digo que sí. Pero también me duele un poco haberlo usado como cebo, porque ese que este artista es mucho más que esta comparación.
PREDICCIÓN DE FUTURO. Dice Laskaar que ha estado trabajando duro a finales de 2018 para que 2019 sea el año de su eclosión… Y no hay motivos para desconfiar de él. Así que la predicción de futuro no podría ser más sencilla: este hombre va a petarlo de forma muy seria en este año que acabamos de inaugurar. Lo mejor de todo es que, como cuando decidió que él mismo elegiría su propio nombre, este «petarlo en 2019» es algo que va a hacer a su manera, en sus propios términos. Y yo no puedo esperar más para ver qué se saca de la manga.
DOS Y DOS SUMAN CINCO. Drake + sensibilidad futurista + Woodkid + voluntad rupturista = Laskaar
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MIRA… «Traición«