Scarlett Johansson sigue empeñada en que la odiemos. Con todas nuestras fuerzas. Dejando de lado el debate sobre su trabajo como actriz (por muchas ganas que tengamos de entrar al trapo), sus esfuerzos como cantante no dejan de ser una especie de carrera de fondo por ver qué artista intocable es la nueva víctima de sus aficiones gerontófilas. El último desafortunado es Serge Gainsbourg, ya que aprovechando el lanzamiento inminente de «From Gainsbourg to Lulu«, un tributo al maestro de la chanson francesa, Johansson no sólo se atreve a cantar «Bonnie & Clyde» a duo con Lulu Gainsbourg, sino que además se marca un mini-video que más que un clip musical parece un anuncio de Moët & Chandon. Nos quedamos descolocados. Y odiando un poquito más a Scarlett Johansson.