Os prometemos que intentamos ver la primera gala de «Supervivientes»… Pero lo único que podíamos ver es la espalda y las patorras de buenorro que ha echado Alberto Isla.
Ayer intentamos ver la primera gala de la edición de este año 2018 de «Supervivientes«… Y vamos a ser sinceros: no vimos una mierda. Echadle la culpa a dos botellas de vino y, sobre todo, al hecho de que este es uno de los formatos más aburridos de la historia de la televisión. Además de que, sinceramente, no tenemos ni repajolera idea de quiénes son un 80% de los concursantes y, de hecho, el 20% que sí conocemos no es que nos interesen demasiado. Que vale: el casting dará juego porque ahí está ese que es el actual marido de la ex del novio de esa otra. Pero, sinceramente, so what?
Aun así, tenemos que reconocer otra cosa: si nos costó mantener la atención en esta gala de «Supervivientes» fue por todo lo dicho… y porque nuestra atención se desviaba continuamente hacia la espalda de Alberto Isla. Puede que este formato sea una excusa para vender cuerpos semidesnudos jóvenes a audiencias de edad elevada: los buenorros y buenorras están para alegrarles las vistas, las Raqueles Mosqueras y los Fernandos están para que se vea representado ese tramo de audiencia que se dirige hacia la senilidad a velocidad galopante. Pero, pese a ello, el Alberto Isla que ha aterrizado en la isla de «Supervivientes» tiene un algo que no tenía antes. O en lo que nosotros ni nos habíamos fijado hasta ayer mismo.
Dicho de otra forma: Alberto Isla ha sacado una espaldaca (y unas patorras) que, mira, son más efectivas a la hora de mojar al común de los mortales (o, por lo menos, a nosotros) que esos dos modelos / youtubers / instagramers / influencers / ¿alguien sabe quiénes son? que supuestamente están en esta edición de «Supervivientes» para constar como los buenorros oficiales. Nosotros nos quedamos con Alberto… Y por eso mismo a continuación van los diez momentos de la primera gala en los que no podíamos prestar atención a otra cosa que a su espalda.
1. Aquí es cuando empezamos a sospecharlo: ¿eso que tiene Alberto Isla es una espaldaca? Antes de que los concursantes volaran hacia la isla, sin embargo, este pensamiento era solo una sospecha que no sabíamos hacia dónde nos llevaría porque, fundamentalmente, estábamos delante de la televisión para ver cómo Raquel Mosquera, en homenaje a la mejor portada de la historia de Lecturas, saltaba medicada.
2. ¿Y vimos a Raquel Mosquera saltando medicada? Pues ni idea. No lo recordamos. Pero sí que recordamos el helicóptero de marras con Alberto Isla cruzando los brazos sobre el pecho mientras por nuestra cabeza pasaban fugazmente múltiples pensamientos de puro BDSM… Ha nacido una obsesión (que no es amor, lo que tú sientes es pura obsesión).
3. Un minuto de silencio para el muslamen de Alberto Isla, que está al nivel de su espaldaca. Ahora bien, todavía no hemos decidido si, desde el plató español, quien miraba con más deseo esas patorras era Isa Pantoja o Alejandro Albalá. Que monten un trío ya y acaben con este dolor, por favor.
4. Recién llegados a la isla de «Supervivientes«, Jorge Javier Vázquez comentaba ante esta imagen que «vaya espalda ha sacado Alberto«… Mira, lagarta, ponte a la cola, que nosotros ya hace rato que la hemos fichado.
5. De los creadores de «La espalda de Alberto Isla por detrás» llega ahora «La espalda de Alberto Isla por delante«… Y sabemos que no ha cambiado nada desde la foto anterior. Pero es que, mira, no nos pidas coherencia y sensatez llegados a este punto.
6. Esta es la prueba definitiva de que se puede tener esa espaldaca y poner poses de persona intelectuala. Mientras se repartían los grupos, Alberto tenía que venderse como el concursante completo, el que lo tiene todo. Y ni que decir tiene que a nosotros nos convenció y que lo hubiéramos cogido para nuestro equipo sí o sí.
7. Alberto Isla tirándose por la tirolina era una mera excusa de la organización del programa para enseñar ESOS antebrazos que quedan perfectamente conjuntados con su espaldaca.
8. Que conste que nos inquieta, nos atormenta y nos perturba que Alberto no se quitara la camiseta ni cuando se pringó de barro de arriba a abajo en la prueba por equipos… Eso sí, la camiseta mojada sobre esa barriguita da mucho juego para la imaginación. Y nosotros la imaginación la tenemos ejercitadísima después de horas y horas delante de Tumblrs de porno amateur.
9. Es oficial: a la espalda de Alberto Isla el rojo le queda fetén… Incluso cuando pone esta cara de estreñimiento hablando de que la persona con la que más probablemente tenga bulla es Mayte Zaldívar.
10. Aquí no vamos a dar más la chapa con la espalda de Alberto Isla, venga, sino que solo vamos a comentar su cara de «puta bida, tete, me ha tocado en el equipo de las momias«. Es esta una frustración inversamente proporcional al regocijo de Raquel Mosquera… Un regocijo que, guapa, es que no sabemos de dónde le sale. [Más información en la web de «Supervivientes»]