¿Por qué deberías leer «El Final del Hombre»? Por muchos motivos, pero sobre todo por Sofía Luna, la primera detective transexual de la novela negra.
La normalización es un proceso que tiene sus tensiones… pero también sus distensiones. Y una de las partes más placenteras de esas distensiones es ver cómo la cultura va asimilando esa normalización y presentándola, por ejemplo, en forma de ficciones en las que la naturalidad campa a sus anchas. Ese es el caso, por ejemplo, de «El Final del Hombre«, la incursión de Antonio Mercero (no, no, no es ese Antonio Mercero, sino su hijo) en la novela negra para presentar en sociedad a uno de esos personajes que nacen con alma de icono: la detective transexual Sofía Luna.
Dice la nota de prensa de «El Final del Hombre» que Sofía Luna es la primera detective transexual, y suerte que al final se acaba puntualizando que es la primera detective transexual de la novela negra, porque lo primero que hemos pensado en Fantastic Mag es (como diría La Veneno) «¿¡Qué amigaaaa!?«, ¿nos estamos olvidando de la Anarcoma de Nazario? Pues eso. Que nos centremos en la novela negra y gocemos con la decisión del policía Carlos Luna de presentar a su veradero yo Sofía Luna justo el día en el que un asesinato impactante pone del revés a la Brigada de Homicidios.
¿En qué consiste ese asesinato? Todo empieza cuando Jon aparece muerto con un cuchillo medieval clavado en el vientre. Jon es hijo de Julio Senovilla, afamado escritor de novela histórica. Un hombre misterioso que, además, ha visto cómo su árbol genealógico se mezclaba con el de otra familia que también esconde muchos secretos: los Crory, entre los que se encuentran novias, hermanas, padres e incluso una asistenta siempre dispuesta a echar las cartas del Tarot. Lo dicho: es la hora de empezar a gozar con ficciones como la de Antonio Mercero en las que la transexualidad es algo totalmente normalizado.
Más información en la web de Alfaguara.