Y, después de «Juego de Tronos», ¿qué hacemos? ¿Nos matamos? Tranqui, que SyFy ya prepara «Nightflyers», serie basada en otra saga de George R. R. Martin.
El final de «Juego de Tronos» ya está en el horizonte y casi, casi, casi podemos sentirlo. Verlo todavía no, porque eso es algo para lo que todavía nos faltan dos temporadas de la serie de HBO (la que está a punto de estrenarse y la que nos llegará un año después… si hay suerte y no son ciertos los rumores de un retraso inevitable). Pero, igualmente, y por mucho que exista la posibilidad (al parecer cada vez más cerca de la confirmación) de que la serie se desdoble en diferentes spin-offs, la pregunta está sobre la mesa: y, después de «Juego de Tronos«, ¿qué?
Porque hay que reconocer que la televisión ha descubierto que la pluma de George R. R. Martin es de oro… Así que ¿por qué no aprovecharse un poquito de ella? Eso parecen haber pensado en SyFy, donde hace poco que han dado la luz verde a la producción del episodio piloto de «Nightflyers«, que vendría a ser la adaptación a televisión de la novela de Martin que tiene el mismo nombre y que se publicó originalmente en el año 1980. Ah, y olvídate de la preocupación de que el autor se muera antes de acabar la saga, porque su libro «Nightflyers» fue el primero de una serie de seis novelas que ya están publicadas y finiquitadas.
Eso que tenemos ganado. Porque, al fin y al cabo, el punto de partida de «Nightflyers» es mucho más que interesante: ocho científicos y un telépata (os prometemos que esto no es el inicio de un chiste) se aventuran hacia los confines del sistema solar a la búsqueda de vida extraterrestre. Nightflyer, por cierto, es el nombre de la nave que los transporta, comandada por un tipo un poco raruno… Aunque para «raruno» es todo lo que ocurre en la travesía. Y hasta aquí podemos leer.
La cuestión es que «Nightflyers» ya tuvo su propia adaptación cinematográfica en el año 1987… Pero lo que proponen en SyFy es hacer borrón y cuenta nueva, poner esta serie en manos de Jeff Buhler y rezar para que se convierta en un pelotazo del mismo tamaño de «Juego de Tronos«. ¿Sonará la flauta?