Será porque estamos en plena fiebre festivalera (con el Sónar en Barcelona y el Día de la Música Heineken en Madrid), pero lo cierto es que esta semana no apetece demasiado la perspectiva de encerrarse en una sala para dejarse las neuronas en alguna propuesta ceñuda. Apetece, por el contrario, algo suavecito y, a poder ser, que te arranque algunas risas anti-cansancio-post-festivalero. Es por eso que es inevitable destacar «Resacón 2. ¡Ahora en Tailandia!«: la primera parte de esta saga es una de esas películas que, hablando en lo personal, no sólo consiguió que me tronchara en la sala de cine, sino que su sombra fue creciendo con el tiempo al descubirme continuamente diciendo ‘no se puede comparar a «Resacón en Las Vegas«‘ cuando acababa de ver otras comedias. Peligro en el ambiente: ¿tener tan encumbrada la primera parte puede llevar a un bajón (más que un resacón) en la secuela? Sinceramente, me la trae el pairo: Zach Galifianakis vale el precio de cualquier entrada de cine.
Eso no significa que en el resto de cartelera quede empequeñecida. De hecho, congratula ver que cuando, se acerca el verano (siempre ocurre igual), salen estrenos más esnobistas de debajo de las piedras. A contar esta semana: «El Viaje del Director de Recursos Humanos» (y su retrato de la comunidad judía menos ortodoxa por la vía de la road movie desde Jerusalén hasta Rumanía), «América, Una Historia Muy Portuguesa» (los estractos sociales menos favorecidos siempre son atractivos, para qué vamos a negarlo), «Naufragio» (en la que Pedro Aguilera parte de un naufragio y se dirige hacia el asesinato) y «Voces desde Mozambique» (cumplimentando así una doble cuota semanal: la del documental y la de las voces femeninas). Entre dos tierras se quedan «Soul Surfer» (porque esta historia de superación de una surfera a la que un tiburón le amputa un brazo podría pintar bien si la presencia de Helen Hunt y Dennis Quaid no fuera tan sospechosa), «Un Cuento Chino» (¿empezamos a vivir una pequeña gran saturación de Ricardo Darín?) y «Micmacs» (porque, a estas alturas, nadie sabe ya qué pensar ni qué esperar de Jean-Pierre Jeunet). De «Algo Prestado» no hace falta decir más que es la típica comedia yanki, pero por la que sí que habría que partir una lanza a favor es por «Kung Fu Panda 2«. Guilty pleasure de la semana.
[Raül De Tena]