PortAmérica 2017 acaba de presentar su primer avance de cartel… Y resulta que este viene acompañado de jugosas novedades. ¡Atiende!
La filosofía gatopardiana afirma que no hay nada mejor que cambiar todo para que todo siga igual. Aunque esta sentencia es flexible y puede dársele una vuelta de tuerca hasta decir, por ejemplo, que se deben cambiar algunas cosas para que no sólo todo siga igual (de bien), sino también para continuar evolucionando.
Esto es lo que ha hecho justamente la promotora esmerArte a la hora de planificar la edición 2017 del festival PortAmérica, la sexta de su historia, que presenta una interesante mezcla de novedades y rasgos ya asentados en su planteamiento. El principal de ellos es su identidad, tomada como innegociable principio fundacional y basada en el intercambio cultural y musical entre Galicia, España y América, un signo distintivo que ha ido creciendo desde el estreno del certamen en 2012.
Pero, a pesar de que PortAmérica logró definir rápidamente su marca y desarrollar año tras año su formato hasta convertirse en uno de los eventos veraniegos más destacados del noroeste español, no se ha conformado con dejarse llevar por la exitosa inercia conseguida. Este espíritu inquieto se refleja en la novedad más importante de cara a su capítulo de 2017: su cambio de sede, que salta de su emplazamiento habitual, Nigrán, a Caldas de Reis (sin abandonar la provincia de Pontevedra) por cuestiones operativas. Más todavía: se modifica su duración con respecto a su pasada edición: y pasa de dos a sus acostumbrados tres días de celebración, que serán los días 13, 14 y 15 de julio. Y, para completar este proceso de mudanza, su cartel musical refuerza su acento latinoamericano en consonancia con su empeño por mostrar los sonidos más candentes en la otra orilla del Atlántico y ofrece una amplia panorámica de la escena alternativa patria sin centrarse exclusivamente en los estándares pop-rock.
Así, de entre los primeros nombres confirmados de la programación artística de PortAmérica 2017 llaman la atención los diversos sonidos americanos que se combinan en su interior: el funk y el hip hop mestizos de los brasileños BNegão & Seletores de Frequência; el rock, funk y soul de los argentinos Illya Kuriaki & The Valderramas y el pop-rock de sus compatriotas Indios; la batidora sónica de ritmos latinos, música disco y acid jazz de los venezolanos Los Amigos Invisibles; la fusión amazónica de pop, rock y hip hop del ecuatoriano Mateo Kingman; el rock cumbiero y ranchero de los estadounidenses fronterizos Orkesta Mendonza; y el rock de los mexicanos Siddhartha (proyecto en solitario del antiguo batería del grupo Zoé) y Porter.
En el batallón nacional aparece también una rica gama de posibilidades: Ángel Stanich, Carlos Sadness, Depedro, Iván Ferreiro (que, curiosamente, presentará su último álbum, “Casa” -Warner, 2016-, lejos de su casa, Nigrán, la anterior localización del festival), Kase.O, Enric Montefusco (en la foto), Niños Mutantes, Novedades Carminha, Rufus T. Firefly, Triángulo de Amor Bizarro y Xoel López (cuya actuación consistirá en un repaso especial de los éxitos de su carrera).
Además del componente musical, en PortAmérica 2017 volverá a tener gran relevancia, como parte intrínseca del festival, el apartado culinario a través del ShowRocking coordinado por Pepe Solla y en el que se prolongará la labor de aunar gastronomía autóctona y alta cocina de la mano de diferentes chefs de prestigio.
Reubicado pero sin perder su esencia, el PortAmérica 2017 ya ha iniciado su nuevo camino.
Más información en la web del festival.