¿Cómo no se van a convertir Whyte Horses en tu nueva banda favorita si incluso (el impenetrable) Noel Gallagher se ha declarado fan de ellos?
¿DE DÓNDE SALEN? De Manchester, aunque se podría afirmar que no proceden de ningún espacio físico en concreto, sino de un rincón de la mente de Dom Thomas, impulsor del proyecto, apasionado de la música hasta niveles enfermizos, coleccionista de discos y co-fundador de los sellos Finders Keepers y Twisted Nerve Records. En cierto modo, Whyte Horses nacieron como el producto de su imaginación, ya que no paraba de darle vueltas a la idea de montar su propio girl-group. Al final, sus pensamientos no tomaron esa forma, sino la de una banda de apariencia convencional que, en realidad, no lo era para nada.
En verano de 2013 se fue con su gran amiga Julie Margat (con quien formó el núcleo duro del grupo) a una cabaña alquilada en la campiña italiana para comenzar a moldear el sonido de Whyte Horses y gestar las primeras canciones de un futuro álbum. El proceso duró tres meses, tiempo en el que, a pesar de los medios limitados de los que disponían, dieron rienda suelta a su amplia visión del pop inspirados por una de sus bandas favoritas, Os Mutantes. El hecho de que el mítico combo brasileño fuese el faro guía de dos mancunianos perdidos en Italia ofrece pistas sobre el carácter peculiar de Whyte Horses, cuyo estilo parte del pop y la psicodelia de los 60 para expandir sus límites lo máximo posible hasta obtener una variedad sonora asombrosa.
El resultado de ese trabajo fructificó en un buen puñado de composiciones que se presentaron en sociedad en 2014 a través del tema “The Snowfalls”, deliciosa pieza que aunaba dulzura eléctrica y una melodía soleada con efectos cautivadores inmediatos. Durante varios meses, esa fue la única prueba de la existencia de Whyte Horses, cuya militancia en la independencia más auténtica se traducía en un modo de actuar discreto que hizo que su nombre se convirtiera en el secreto mejor guardado (o, directamente, en el mayor misterio) de la escena de Manchester. De hecho, su álbum de debut, “Pop Or Not” (CRC, 2016), fue una especie de artefacto privado sólo compartido en la red mediante algunos cortes (la animada “La Couleur Originelle”, la muy girl-group “Natures Mistakes” o la beatleliana “Feels Like Something’s Changing”) hasta que se editó oficialmente el pasado año.
NOS TIENEN TÓ LOCOS PORQUE… Whyte Horses manejan con total libertad y sin prejuicios la materia pop en su acepción más luminosa, efusiva y estimulante. Ellos mismos juegan con ese concepto en el título de su disco, “Pop Or Not”, que funciona como una cornucopia llena de todo lo que puede ofrecer el género desde una perspectiva clásica perfilada con rasgos tan personales como la aportación vocal de Julie, que brilla especialmente cuando exhibe sus raíces francesas. Este es uno de los signos distintivos del libreto de Whyte Horses, donde se mezclan sonidos refrescantes, cálidos, ensoñadores, vibrantes y candorosos con encontrados arrebatos de positividad, felicidad, nostalgia y melancolía.
Si hubiera que acotar las coordenadas estilísticas de este burbujeante brebaje, habría que recurrir a los modos de, sobre todo, The Go! Team (por algo su miembro Ian Parton intervino en el LP), una referencia que se condensa en la canción emblema de “Pop Or Not”: “Promise I Do”, una colorida explosión de confeti pop que, inevitablemente, entró en nuestras canciones favoritas de 2016. Aunque, además de este y los anteriormente mencionados, hay donde elegir de entre el total de ¡17! cortes (incluyendo instrumentales) que conforman el LP.
PREDICCIÓN DE FUTURO. Teniendo en cuenta la particular idiosincrasia de Whyte Horses, sería fácil creer que cualquier cosa es posible con respecto a su futuro. Por ejemplo, que tal como aparecieron casi expresamente para materializar “Pop Or Not”, se esfumen por arte de magia. Pero la pujanza de su ópera prima -que ha recibido alabanzas incluso del mismísimo Noel Gallagher– alcanzada a lo largo de los últimos meses invita a pensar en lo contrario. De hecho, han publicado una versión de su álbum interpretada con el coro infantil de la St. Bartholomew’s School, reflejo de su espíritu inquieto. Eso sí, han dejado el listón tan alto que se antoja complicado superarlo… a no ser que la revoltosa cabeza de Dom Thomas diga lo contrario.
DOS Y DOS SUMAN CINCO. Personalidad singular + pop cegador + The Go! Team + ánimo aventurero = Whyte Horses
MÁS EN… su Facebook y su SoundCloud.
MIRA… “Promise I Do”