Lo reconocemos: nos ha costado elegir tan solo 25 temas para nuestra lista de las mejores canciones internacionales de este año 2016.
Aquí va una confesión desde el alma: tal y como os explicábamos hace unas semanas en esta editorial, en Fantastic este año hemos decidido reducir ostentosamente las listas de lo mejor del año. La idea es, básicamente, pasar de las listas de cosas «buenas» del año y apostar directamente por las listas de cosas que pasarán a la puñetera historia (listas que, por eso mismo, han de ser mucho más reducidas)… Y la idea nos gusta. Eso que vaya por delante. Pero están habiendo algunas listas en las que nos está costando mantener nuestra promesa.
Listas como la que nos ocupa. Al fin y al cabo, ¿cómo reducir las mejores canciones internacionales del año a tan sólo 25 temas? Porque discos pluscuamperfectos hay pocos al año, EPs geniales menos… ¿Pero canciones? Ahí, lo sentimos, pero sí que hay un buen puñado de artistas cada año capaces de crear un single tan tremendo que será escuchado, recordado y gozado de aquí a cuarenta años. Y no nos podéis decir que no.
Aun así, lo hemos hecho. Nos hemos roto los cuernos, nos hemos ceñido a 25 canciones… Y las podéis escuchar a continuación.
25. COME DOWN, de Anderson .Paak
24. BETTER LOOKING BROTHER, de Lust For Youth
23. PROMISE I DO, de Whyte Horses
22. TWILIGHT DRIVING, de Methyl Ethel
21. THE HUSSLE, de Lambchop
[/nextpage][nextpage title=»Del 20 al 16″ ]20. BARRICADE (MATTER OF FACT), de Yumi Zouma
19. DO YOU NEED MY LOVE, de Weyes Blood
18. THE WOMAN THAT LOVE YOU, de Japanese Breakfast
17. NEW SONG, de Warpaint
16. HOW I FAILED ETHICS, de The Magnetic Fields
[/nextpage][nextpage title=»Del 15 al 11″ ]15. I HAVE BEEN TO MOUNTAIN, de Kevin Morby
14. YOUR BEST AMERICAN GIRL, de Mitski
13. ROBOT STOP, de King Gizzard & The Lizard Wizard
12. CH-CHING, de Chairlift
11. SUPER NATURAL, de Danny L Harle feat. Carly Rae Jepsen
[/nextpage][nextpage title=»Del 10 al 6″ ]10. THE POP KIDS, de Pet Shop Boys
9. LAZARUS, de David Bowie
8. DRONE BOMB ME, de ANOHNI
7. NO WOMAN, de Whitney
6. IT MEANS I LOVE YOU, de Jessy Lanza
[/nextpage][nextpage title=»Del 5 al 1″ ]5. TEACH ME TO FORGET, de The Radio Dept.
4. SCATTERED ASHES (SONG FOR RICHARD), de Minor Victories
3. FAMOUS, de Kanye West. La mejore parte de «Famous« de Kanye West es justamente la que no es obra del amigo Kahn-yey: el bam-bam sampleado del tema de Sister Nancy. Pero el caso es que el sample de Kanye termina por mejorar hasta la canción original -que, ojo, puede que haya sido escogida justo porque trata de la misoginia en la música- y ahí es donde se ve la marca del genio. Los demasiados y repetitivos bam-bams del tema dancehall de Sister Nancy se convierten aquí en vibrantes escansores del ritmo, y la apabulladora reinterpetación que Rihanna hace del “Do What You Gotta Do” de Nina Simone, junto a la letra de Kanye (“The sun is gonna rise / we never gonna die«… Siempre funcionan las frases de este rollo como apeladoras a las emociones del oyente) la convierten en una canción que realmente alberga mucha belleza. Tanta, que se te olvida que esta belleza está siendo usada para golpear directamente a la estrella de pop más tocha del planeta. Y, sin entrar en moralidades y demás, eso es un mérito. Sobre el célebre y polémico vídeo, si es capaz de hacer que el mismo Werner Herzog se tome casi diez minutos de su tiempo para hacer una vídeo-crítica de éste (en la que quizás sea el cineasta alemán el que más haya dado en el clavo sobre el significado del video, cuando apunta que “you keep thinking, are these people for real or are they doppelgängers?”)… ya ha valido la pena que exista. [Patri di Filippo]
2. DAYDREAMING, de Radiohead. No fui capaz de percibir en totalidad la grandeza de «Daydreaming» hasta que vi la disección del videoclip, creada por un fan explorando sus diferentes capas de significado en busca de una explicación a su simbología. Independientemente del tamaño de la paja mental producida en dicha búsqueda, aquella teoría ponía de relieve la inmensa tristeza escondida en estos seis minutos y medio. El videoclip, dirigido por Paul Thomas Anderson, dibuja un hombre perdido, un corazón roto, un fantasma abriendo puerta a puerta el camino hacia su final. Quizá, detrás de la lenta y lamentable mutación de Thom Yorke en vagabundo desharrapado que viene mostrando últimamente, se encuentren los efectos de la depresión, del vacío (tras su ruptura con la que fue su pareja durante 23 años), el fin de la vida… Imposible no recordar a Bowie cerrando tras de sí la puerta en «Lazarus«, cuando vemos a Thom acabando acurrucado en la madriguera. En uno de los años más funestos para la música que se recuerda, «Daydreaming» es uno de sus momentos más tristes. Es también una canción de belleza sublime, y una de las mejores en la carrera de Radiohead: en mi opinión la banda más importante del último cuarto de siglo. Una banda cuya capacidad creativa no da signos de morir. Y esperemos que siga así, porque de muertes ya hemos tenido suficiente. [Rodrigo Núñez]
1. INTO YOU, de Ariana Grande. Cuando tomas la decisión (consensuada) de que una canción como «Into You» de Ariana Grande sea el mejor tema del año en las listas de tu medio de comunicación, es normal que surjan las preguntas… ¿Cuáles son los parámetros con los que se decide cuál es la mejor canción del año? ¿Deberíamos elegir a ese tema complejo y sobreintelectualizado que ha conseguido hacer evolucionar un poquito más la historia de la música? ¿O debemos primer el single pluscuamperfecto, esa canción que te entra en la cabeza y no te va a abandonar en toda la vida, esa canción que escucharás en la radio en el año 2050 y que inmediatamente te pondrá de buen humor y con ganas de tararear? Difícil elección.
Supongo que, al fin y al cabo, cada año es diferente, cada lista de las mejores canciones del año es diferente. Pero este año nadie podrá negar, eso sí, que «Into You» de Ariana Grande se ha convertido en un himno icónico que no se veía en el mundo del pop desde los inicios de Lady Gaga (¿»True Romance«?) o desde el «Work Bitch» de Britney. Y eso teniendo en cuenta que el rollito de Grande es mucho más «cool» (cómo odio este puto término) que el chonitronismo ilustrado de las dos mencionadas: nada de bombo barato, nada de subidones pseudo EDM, lo de «Into You» es electro pop de toda la vida elevado al nivel de arte. Nada más. Y nada menos. Ah, bueno, claro, y también tiene el mejor estribillo del siglo: ¿»A little less conversation and a little more touch my body«? Va a ser nuestro mantra durante mucho, mucho, mucho tiempo. [Raül De Tena]
[/nextpage]