Que vaya por delante que este 9 songs está firmado por Buena Esperanza pero que bien podría estar firmado por The Secret Society o por el sello Gran Derby… Todos estos son proyectos en los que está involucrado Pepo Márquez y es precisamente él quien nos ha regalado esta colección de pildoras mágicas para hacer más llevadera la crisis de los 30. Y es que Márquez es (dulcemente) ubicuo como una presencia de esas que miran desde el cielo… pero con los pies bien puestos en la tierra. Su palabra sagrada son canciones que a veces ayudan y, otras, remueven cosas por dentro que no queremos que nos remuevan. A veces parece que Pepo Márquez está en todos sitios porque se implica hasta las trancas en todo lo que le apasiona: ya sean grupos o sellos. Podría decirse que The Secret Society es su proyecto más personal, mientras que Buena Esperanza es tan genuino porque implica la reunión de unos colegas de toda la vida… Gran Derby, por su parte, es un sello nacido de un cariño por la música que se nota en el mimo con el que tratan todas sus referencias.
No hace demasiado tiempo ya os anunciamos que Buena Esperanza publicaban su primer EP, titulado «10»», que se podía escuchar y adquirir en el BandCamp de la banda. El mejor complemento para entender cómo Pepo Márquez y compañía han llegado a sintetizar en sus canciones ese sentir generacional desprejuiciado, divertido y con la dosis justa de rabia es precisamente este 9 songs. Si te rondan los 30, prepara las tiritas. Porque esto duele.
1. «White Daisy Passing», de Rocky Votolato (en el disco «Makers»; Barsuk, 2006). «Una canción melancólica pero no triste. Una mirada al pasado con tu amor al lado, enumerando las cosas que se hicieron y que os han llevado hasta aquí. Hay veces que el chico tímido consigue enamorar a la chica de sus sueños y esos son Rocky y April Votolato desde hace años. “Por favor, ve más despacio” a modo de súplica, como sabiendo que llega un momento en la vida en el que nada necesita tanta urgencia. Hay que fijarse en los detalles (“Hay un lugar secreto que conozco…”) Una especie de resumen necesario para coger aire y seguir adelante.»
2. «House by the Sea», de Iron & Wine (en el disco «The Shepher’s Dog»; Sub Pop, 2007). «A medida que vamos cumpliendo años, soñamos cosas más complicadas. Nos visitan viejos fantasmas, personas que un día formaron parte de nuestra vida y a las que nos gustaría hablar y decirles: “Te estuve esperando todo este tiempo”. A veces estos sueños no atienden a ningún deseo y se fabrican a base de nuestras fobias y filias. En esta canción hay una casa en la costa, dos hermanas con piel amarilla, una tumba, un océano entre medias, unas olas que parece que lo van a arrasar todo. Y a pesar de eso, uno despierta vivo para contarlo.»
3. «California Dreamer», de Wolf Parade (en el disco «At Mount Zoomer»; Sub Pop, 2008). «A partir de los 30 deberíamos bailar más para sobrellevar la carga con más dignidad. No un baile basto de desenfrenado. Un baile que una, que nos permita ser conscientes del ritmo y de los demás. Esta canción invita al baile y a viajar por la autopista Highway 1 que recorre la costa del Pacífico de Estados Unidos. Es el viaje importante. El que se hace con la persona más importante. Y el que se recuerda toda la vida. Viajar es crecer y sin viajar, uno no crece, envejece.»
4. «Cold Cold Water», de Mirah (del disco «Advisory Comité» – K Records, 2001). «Una canción de amor maduro, apasionada y sin tonterías. Una canción como una película de aventuras, con sus caballos, sus ríos que hay que atravesar, sus montañas. Supongo que el momento más duro y a la vez el más esperanzador de todos es cuando descubres que el amor no es el fin, sino el camino para llegar al fin. Y entonces te das cuenta de que no hay mejor forma de vivirlo que a lomos de un caballo inventado que te lleva por lugares desconocidos.»
5. «Diamond Eyes», de Deftones (en el disco «Diamond Eyes»; Reprise, 2010). «Hay grupos que nos acompañan desde siempre. Me regalaron el primer disco de Deftones en 1996, cuando cumplí 18 años. Se convirtió en uno de mis discos preferidos. Desde entonces, ellos me siguen y yo les sigo a ellos con menor o mayor emoción. 14 años después han vuelto a hacer un disco apabullante. No sé si lo hubiera entendido del todo de haber tenido 18 años ahora. Me reconcilia con parte de mi adolescencia y la voz de Chino Moreno me lleva a sitios que hacía tiempo que no visitaba.»
6. «Downtown», interpretada por Frank Sinatra (en el disco «Strangers in the Night»; Reprise, 1966). «Uno sabe que no hay vuelta atrás cuando escucha a Frank Sinatra en la intimidad cantar «Downtown» (canción que popularizó Petula Clark hace eones) y manda SMS a su mejor amigo con este texto: “¿Te acuerdas del vinilo que compré de Sinatra? Pues tiene un pepino QUE NO TE LO CREES”. Y así todo.»
7. «Can’t Touch This», de MC Hammer (12” del single aparecido en «Please Hammer Don’t Hurt’Em»; Capitol, 1990). «Uno sabe que ha perdido el sentido del ridículo cuando se compra cosas como esta y encima las enseña. Es la edad. Ahora MC Hammer es pastor en alguna iglesia del sur de Estados Unidos. Igual dentro de poco tenemos un nuevo Waco.»
8. «Back and to the left», de Texas is the Reason (en el disco «Do You Know Who You Are?»; Revelation, 1996). «Necesito canciones como esta que me mantienen conectado con todo lo que me gusta de lo que he vivido, con la gente que conocí, con los sitios que visité y con las cosas en las que creí. Necesito canciones como esta para vivir mejor, crecer mejor y pensar mejor. Y es bonito que sigan ahí para nosotros.»
9. «El día de Mañana», de Nueva Vulcano (en el disco «Juego Entrópico»; Bcore, 2006). «Un himno para poder continuar hasta los 40. “He oído que acostumbra a haber una mañana siguiente”. En toda la boca. Pues sí. De eso se trata: de hacerlo lo suficiente bien como para llegar al día siguiente sin remordimientos. Vivan Nueva Vulcano y vivan Aina también.»